En un reciente artículo científico indexado se ha analizado con un método top-down efectos de la subida de las temperaturas asociada al cambio climático y teniendo en cuenta diferentes escenarios de cambio climático en el incremento del gasto en electricidad en la ciudad de Viena. Así el aumento de temperaturas provocará en verano un incremento importante del gasto de la electricidad en esta ciudad centroeuropea hacia el año 2050, básicamente destinada al aire acondicionado. Es, por tanto, necesario que las autoridades pertinentes hagan realidad las propuestas de mitigación de cambio climático y de disminución de la isla de calor urbana. Por ejemplo un aumento del número de superficies verdes, un cambio en la movilidad, con un aumento del número de personas por vehículo privado, un cambio en combustible utilizado por los vehículos, en lugar de ser coches con motor de combustión que utilizan la gasolina y el gasoil, sean vehículos eléctricos. También una mejora del aislamiento térmico de las viviendas construidas actualmente y en los próximos años. Es evidente que también una mejora de las políticas destinadas a la igualdad a la población y sobre todo propuestas de energía barata para las personas con peores estándares de riqueza para que la vulnerabilidad ante la ola de calor aumenta especialmente en estas personas ya que no disponen de aparatos de aire acondicionado.

El incremento térmico asociado al cambio climático se suma a la isla de calor en las ciudades. Esto tiene dos efectos, un aumento de la generación de gases de efecto invernadero, ya que los ciudadanos aumentan los gastos destinados a climatización, con aparatos de aire acondicionado, y la electricidad que se destina para hacer funcionar los aparatos genera CO2, y un incremento de la isla de calor, ya que los aparatos de aire acondicionado incrementan la isla de calor urbana, ya que calientan el aire adyacente a los edificios.

Es por tanto una necesidad imperiosa la de los científicos y las autoridades locales la de entenderse para poner freno al cambio climático y al incremento de la temperatura en las ciudades, que a menudo también provoca un aumento de la contaminación, con efectos negativos, como un aumento de la morbilidad y la mortalidad de los ciudadanos.