Colorimetría: Cómo saber si eres de piel cálida o fría

Según nuestra tonalidad nos favorecerán más unos colores u otros, para ello debes saber si tu colorimetría es de paleta cálida o fría

La colorimetría nos ayuda a saber qué colores nos favorecen según nuestro color de piel, ojos y cabello

La colorimetría nos ayuda a saber qué colores nos favorecen según nuestro color de piel, ojos y cabello / pexels

Marina Falcó

Marina Falcó

Saber vestirse de forma que uno o una se vea más favorecido es todo un arte. Sí, ponernos ropa sabemos todos, pero elegir las prendas que resalten nuestros puntos fuertes en lo que a físico se refiere ya es un poco más complicado. Los looks que nos embellecen dependen de varios factores, entre ellos al tono al que pertenecemos, es decir si somos de piel cálida o fría.

A partir del tipo de piel al en el que encajamos habrán unos colores que nos quedarán mejor que otros, y aquí es donde entra en juego la colorimetría: esa ciencia que estudia las medidas cualitativas y cuantitativas del color y que en el sector de la moda se aplica para conocer qué tonos quedan mejor a unas personas y otras.

Porque aunque parezca mentira un color puede resaltarnos y avivar nuestros rasgos más bellos o por el contrario acentuar algunos defectos e incluso apagarnos y esto no solo afecta a la ropa, sino que un maquillaje que no nos favorezca, puede llenarnos la cara de sombras y tornarnos más sombrías o por el contrario, llenar el rostro de luz.

Cómo saber si soy de piel cálida o fría

Para saber a qué colorimetría perteneces hay que tener en cuenta tres variables: color de ojos, color de cabello y color de piel. La máxima para conocer a qué grupo perteneces responde a si en tu pigmentación dominan las tonalidades amarillas, por lo que serías cálida, o si por el contrario tienes presencia de colores rosas, azules o grises, que entonces serás fría.

Manchas amarillas en un ojo de colorimetría cálida

Manchas amarillas en un ojo de colorimetría cálida / Reham BouShahine

Como saber esto a simple vista quizás no sea tan sencillo, observa varios detalles de tu físico que te darán la respuesta la respuesta a qué colores son los que mejor te quedan:

  • Cuanto tomas el sol: si te bronceas, eres cálida; si solo te pones roja, eres fría.
  • El color de las venas: todos tenemos la venas azules pero obsérvalas en la parte interior del antebrazo: si son de color verde, eres cálida; si se ven azules, eres fría.
  • Las palmas de las manos: si son amarillas o de color asalmonado, eres cálida; si el tono es rosado, eres fría.
  • El cabello: aunque en un primer momento podamos pensar que todas las personas morenas son cálidas, no es así. Las personas frías, cuando están al sol, tienen reflejos cenizas; sin embargo si el brillo tiene es dorado, eres cálida.
  • Ojos: si tus ojos, sean del color que sean, tienen alguna mancha amarilla, eres cálida; si estas son en gris o no tienen ninguna, eres fría.

Bonus:

Puede suceder que una misma persona tenga rasgos combinados de ambas colorimetrías en ese caso, serás de la que más rasgos tengas. Pero si a pesar de eso no te queda claro, hay un truco que ayudará a despejar cualquier duda. Para ello deberás utilizar complementos dorados y plateados.

Ponte, por ejemplo, un anillo, un collar o un cinturón dorado y otro plateado sobre cada una de las manos. En seguida verás como tu piel se ve de forma diferente con cada uno de ellos viéndose con mejor aspecto en uno de ellos.

Si tu piel tiene mejor aspecto con el complemento dorado (irradia más luz, o resalta tu tono natural) eres cálida; si por el contrario percibes cómo tu piel resplandece con el complemento plateado, entonces eres fría.