La jueza de Instrucción número 1 de Catarroja envió ayer a prisión al exconcejal de Compromís de Alfafar, Joan Sorribes, detenido por presuntos abusos sexuales a una menor durante el tiempo que vivió en acogida en su casa, mientras que dejó en libertad con cargos a su mujer, arrestada por los mismos hechos. Ambos están investigados en una causa abierta por el juzgado por delitos de abuso sexual continuado contra una chica menor de 16 años y tenencia de pornografía infantil.

La magistrada dictó ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, para Sorribes y libertad provisional para su mujer, con medidas cautelares como comparecer cada 15 días y no poder salir del país -se le ha retirado el pasaporte-. Además, la jueza le impuso una orden de alejamiento de 200 metros sobre la menor, su lugar de residencia, su centro de estudios o cualquier otro lugar que frecuente, que le impide comunicarse con ella por cualquier medio durante el tiempo que la protección continúe en vigor.

En el registro, realizado por orden judicial en el piso de los investigados, los agentes de la Guardia Civil tuvieron que «utilizar mascarillas y guantes por el estado en el que se encontraba».

El detenido, Joan Sorribes, fue portavoz de Compromís en la última legislatura en el Ayuntamiento de Alfafar y figuraba como número dos de la lista que concurrió a las elecciones municipales de 2019 mientras que su pareja aparecía en el puesto tres. La coalición solo obtuvo una edila por lo que los detenidos no han entrado en el pleno. Por su parte, la detenida es una activista del barrio Orba que preside una asociación dedicada a acciones de intervención social por lo que dispone de un local en un edificio municipal y «recibe anualmente subvenciones», según fuentes municipales.

Tras conocer los hechos, Compromís emitió un comunicado en el que sus dirigentes mostraban su «más absoluta condena por los delitos por los que están acusados» y aseguraron que ambos no son actualmente afiliados. Aún así, la Comisión Ejecutiva Nacional «ha tomado la decisión de excluir a estas personas de cualquier actividad orgánica e institucional».

No son «familia acogedora»

Por su parte, fuentes de la Conselleria de Igualdad y Políticas inclusivas han explicado que la pareja no forma parte de la red de familias acogedoras. En este caso, la menor estuvo residiendo con la pareja siguiendo la modalidad de «familia alargada», circunstancia que se da cuando existe una relación con el o la menor pero no hay lazos familiares. «En este caso, son los servicios sociales municipales los que emiten el certificado y realizan el seguimiento. Y en el tiempo que duró el acogimiento « no se produjo ninguna denuncia».