Un hombre y una mujer fueron detenidos ayer en València por agentes de la Policía Nacional como sospechosos de estafar más de 50.000 euros en el último año a mujeres octogenarias haciéndose pasar por revisores de gas. Incluso llegaban a amenazar a las víctimas, añaden fuentes policiales, con imponerles sanciones económicas o cortar el suministro si se mostraban reticentes a que revisasen su instalación.

Los detenidos, un hombre y una mujer de 27 y 34 años y de origen español, para los que se decretado su ingreso en prisión a los que también se acusa de hurto, aprovechaban para sustraerles joyas de sus domicilios. Las investigaciones comenzaron a mediados de octubre a partir de un hurto cometido a una mujer de 83 años, a la que el hombre engañó en la calle para entrar en su casa. Una vez allí, le dijo que iba a realizar la revisión de los fogones y que se quitara las joyas para evitar radiaciones.

La mujer accedió a la vivienda sin que la anciana se diera cuenta y se apoderó de las joyas, que vendió el mismo día, aunque la Policía logró recuperarlas.

Los detenidos habían realizado más de 30 operaciones de venta de joyas este año y otras 15 más en 2018, y se les relaciona con 11 estafas en València capital, aunque no se descarta que hayan actuado en otras localidades de la provincia, añaden desde la Policía Nacional.

Dinero y joyas

En uno de los robos, llegaron a estafar a la víctima 16.560 euros, argumentando que tenían que realizar varias reparaciones en su instalación de gas, mientras que a otra le sustrajeron del interior de su vivienda cerca de 7.000 euros. A otra víctima, con una discapacidad visual, le hurtaron hasta 900 euros y varias joyas, mientras que en otro caso, le estafaron 140 euros, además de sustraerle otros 500 y varias piezas de joyería, hasta alcanzar un valor acumulado de 50.000 euros.