Un hombre se enfrenta a una pena de 28 años de prisión por violar de forma continuada a una joven en una localidad de la Vall d’Albaida durante casi un año hasta dejarla embarazada. La víctima, de 26 años, no padece ningún tipo de discapacidad mental diagnóstica aunque los forenses que declararon en el juicio establecieron que tiene una personalidad «introvertida y sumisa», de la que se habría aprovechado presuntamente el acusado, quien incluso la tenía anotada en su teléfono móvil con el nombre de «tonta», según él mismo admitió dando una surrealista explicación.

Los hechos se remontan a octubre de 2017 cuando ambos se conocieron en un puesto de ropa que tenía el acusado en el mercadillo de la localidad. Según la versión de la denunciante, intercambiaron los teléfonos para que le avisara cuando tuvieran unas prendas determinadas. No obstante, cuando días después éste llamó a la clienta para que acudiera a su casa para mostrarle el género nuevo, estando en la habitación a solas, y cuando la joven ya le había manifestado su intención de marcharse, el acusado presuntamente le realizó tocamientos y la violó amenazándole con un cuchillo en el cuello.

En los meses posteriores la habría forzado sexualmente en varias ocasiones más bajo amenazas de muerte sin utilizar en ningún momento preservativo, según el escrito del fiscal. En una de ellas, según explicó la víctima, había un segundo hombre —al que no se le ha podido identificar— quien también la violó estando ella en una situación de total indefensión y bloqueo por el pánico. Lo único que recuerda de este segundo agresor es que hablaban entre ellos en su idioma y no entendía lo que decían.

Durante el juicio celebrado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Valencia el procesado, de 39 años y origen marroquí, negó haber forzado sexualmente a su víctima en ningún momento y que supiera que tuviera algún tipo de limitación intelectual. Según defiende, tenían una relación próxima al noviazgo en la que quedaban dos o tres veces por semana para tener sexo y que era ella quien quería quedarse embarazada. Sobre el motivo de la denuncia en noviembre de 2018, el acusado lo atribuye a los celos de ella al haberlo visto con otra pareja.