Agentes de la Unidad de Asuntos Internos (UAI) de la Policía Nacional ha detenido en València a un agente destinado en un grupo antidroga por su presunta vinculación con organizaciones dedicadas al narcotráfico a gran escala. La detención del policía, que desde hace casi dos años estaba destinado en la unidad de drogas y crimen organizado (Udyco) de la Jefatura Superior de Policía de València, fue practicada en su domicilio, en Aldaia, a las cinco de la madrugada de ayer y posteriormente fue trasladado a los calabozos de la central del cuerpo, en la Gran Vía Ramón y Cajal.
Además del agente, ha sido apresado en un domicilio de València un presunto cómplice del policía, un hombre con vinculaciones con el tráfico de drogas en cuya vivienda fueron intervenidos varios kilos de cocaína y de hachís.
Así mismo, ha sido citada como investigada una agente de la Policía Nacional destinada en un grupo de investigación de una comisaría de la provincia de València cuyo nombre habría salido a relucir en la investigación de Asuntos Internos pero que no estaría implicada en los hechos que han derivado en la detención de su compañero, sino que su identidad profesional habría salido a relucir porque el sospechoso se habría valido de ella en alguna de las actuaciones que se le achacan sin que su compañera lo supiera.
Un alijo de 200 kilos
La investigación de Asuntos Internos dio comienzo hace casi un año, a raíz del análisis de un paquete de mensajes desencriptados de Sky que se habrían cruzado el ahora arrestado y un grupo de narcos de València, en los que el policía aparecería directamente relacionado con la llegada, en 2020, de un cargamento de 200 kilos de cocaína al Puerto de València, introducido, como la mayoría de ellos, por el método conocido como ‘gancho perdido’.
De momento, el policía detenido, F. L., sería el único identificado en esas conversaciones de Sky, legibles, como el resto de los 900 millones de mensajes desencriptados a partir de marzo del año pasado, después de que agentes especializados en comunicaciones de las policías francesa, belga y neerlandesa lograsen vulnerar el algoritmo que protegía esas conversaciones.
Por esa razón, no se prevén de momento más detenciones en relación con esos hechos, aunque la investigación, que dirige la jueza de Instrucción número 2 de València, continúa abierta para tratar de desenmarañar toda la trama.
Consultas en las bases de datos
Según la información a la que ha tenido acceso Levante-EMV, la conversación generada por varios interlocutores –entre los que figuraría el agente– a través de la mensajería de Sky tras la llegada de ese contenedor con 200 kilos de cocaína no sería la única en la que aparece F. L.
De hecho, los analistas repararon en él por su forma de hablar y por los encargos que presuntamente se le encomendaban, muchos de ellos relacionados, al parecer, con consultas en las bases de datos policiales, supuestamente para facilitar información a los narcotraficantes acerca de matrículas y personas.
De momento, está investigado por delitos de tráfico de drogas, revelación de secretos y organización criminal, delitos que podrían aumentar en función de las pruebas que hayan recabado los agentes de Asuntos Internos a partir de los registros practicados ayer. Tampoco se descarta que pueda ser vinculado con otros cargamentos de cocaína de los llegados al Puerto de València en los últimos tres años.
Tras el registro de su domicilio, los investigadores se trasladaron a la Jefatura Superior de Policía de València e inspeccionaron la taquilla reservada al agente detenido, a quien ya se ha retirado el arma y el carné profesional.
En principio, está previsto que pase a disposición de la jueza de Instrucción el próximo viernes, mientras los investigadores completan las diligencias y ultimas algunas gestiones pendientes.
