Cinco consejos para proteger tu piel del sol

Marca del bikini.

Marca del bikini. / Levante-EMV

Saray Fajardo

Saray Fajardo

Con la llegada del verano, es importante seguir algunas recomendaciones para cuidar la piel ante el incremento de la exposición al sol, ya que este tiene consecuencias beneficiosas para la salud, pero también nocivas. A continuación, te proponemos algunos consejos.  

Utilizar protector solar

Usa crema con un alto factor de protección solar. Es conveniente aplicarla entre 20 y 30 minutos antes de la exposición al sol y repetir la misma operación, al menos, cada dos horas. 

Es conveniente volver a utilizar la protección tras tomar el baño, secarse o sudar, sobre todo en las zonas más sensibles. Además, se deben seguir las instrucciones del bote para un correcto uso. 

Usar ropa y accesorios adecuados

Protégete con ropa y accesorios adecuados como gorro o gafas de sol homologadas para no dañar la vista. 

Los tejidos nuevos ofrecen mayor protección que los gastados. Se recomienda utilizar ropa de algodón, jeans o poliéster para evitar la filtración de los rayos de sol. En cuanto al color del tejido, las prendas oscuras bloquean mejor los rayos UV. 

Consejos para las horas centrales

Evita la exposición prolongada durante las horas centrales del día, es decir, de 12 h a 16 h y, sobre todo, durante julio y agosto. No realices deporte, trabajos o esfuerzos que puedan incrementar los golpes de calor. Por el contrario, intenta pasar estas horas en las zonas más frescas o mejor ventiladas del hogar. Con los menores es necesario extremar todavía más las precauciones. 

Evitar productos con alcohol

Ten cuidado con los cosméticos, las colonias, los perfumes o cualquier otro producto que contenga alcohol, ya que puede provocar quemaduras o manchas oscuras en la piel. Es importante que la piel esté correctamente hidratada, limpia y sin maquillaje. 

Algunos medicamentos y antibióticos también pueden ser fotosensibles y comportar reacciones en la piel. 

Correcta hidratación y alimentación

Mantén una hidratación constante, ya que este líquido supone entre el 50% y el 60% del cuerpo. Por ello, necesitamos entre dos y tres litros diarios de agua.

Es importante llevar a cabo una alimentación saludable basada en frutas, verduras y hortalizas ricas en agua y vitaminas A y C para reforzar el cuidado de la piel y prevenir el envejecimiento cutáneo preventivo.