El Valencia ha vuelto por fin a la Liga de Campeones, pero el trote errático de las últimas temporadas se cobrará un peaje considerable. Le espera una Champions de vértigo. Las dos decimosegundas plazas de las temporadas precedentes, y su ausencia en las eliminatorias finales de la máxima competición continental (la última cota destacable fueron los octavos de final frente al París Saint Germain en 2013, y las semifinales de Liga Europa en 2014), ha provocado el derrumbe valencianista en el ranking UEFA. El club de Mestalla se sitúa en el puesto número 41 de la clasificación de clubes, que usa como baremo el rendimiento global de las últimas cinco campañas en torneos europeos. La suma de esos resultados combinados determinan los cabezas de serie en los sorteos de la UEFA y la configuración de los bombos. Traducido a efectos prácticos, casi con total seguridad el Valencia formará parte del bombo 4, por lo que le esperarán tres rivales de nivel y un presumible «grupo de la muerte».
A expensas de que acaben las ligas nacionales y se sepan los campeones de la Champions y Liga Europa, el Valencia será el caramelo envenenado de un bombo que suele deparar rivales exóticos de menor rango. Si el corte tuviera lugar hoy, al Valencia le esperaría como cabeza de grupo alguno de los clubes campeones de liga, como el Bayern, Juventus, PSG o Manchester City. También cabe la posibilidad de quedar emparejado con el Oporto o alguno de los campeones de la Europa del Este con alto coeficiente, como el Shaktar Donetsk. Se podría colar el Liverpool en caso de vencer al Real Madrid en la final de la Champions.
El bombo 2 es el que ha ocupado el Valencia en la última década, en los sorteos de 2007, 2010, 2011, 2012 y 2015. En este grupo se encontrarán las grandes alternativas, como el Manchester United, Tottenham, Nápoles y Borussia Dortmund, candidatos firmes a pisar las eliminatorias finales.
Acorde a la actual baremación, entre los 45.000 y 65.000 puntos acumulados estarían los rivales del grupo 3, un bombo en el que el Valencia tiene todavía la esperanza de colarse, a pesar de contar con solo 36.000 unidades al no sumar en las campañas 14/15 y 16/17. En esa órbita circulan clubes como la Roma, Lazio, Schalke 04 o Mónaco, a evitar de cualquier forma. Dynamo de Kiev y Red Bull Salzburgo serían más asequibles. Hasta cinco clubes españoles (Madrid, Barcelona, Atlético, Sevilla, Villarreal y Athletic Club) han adelantado al Valencia en puntuación UEFA, lo que recluye al club de Mestalla en el posible bombo 4, en los que evitaría a rivales de menos entidad como Brujas, Galatasaray, Celtic, Young Boys y otros clubes que deberán pasar el corte de la eliminatoria previa de mediados de agosto.
Para encontrar al Valencia en un sorteo así hay que remontarse a 1999, en su estreno en la competición. Encuadrado en el bombo 3, el equipo de Héctor Cúper se midió al Bayern, PSV y recogió en el bombo 4 al Rangers. Una exigencia máxima de la que, contra todo pronóstico, respondió acabando líder del grupo, en el camino triunfal hacia la final de Saint Denis contra el Real Madrid. La cita de París, el subcampeonato de San Siro en 2001 y la conquista de la Copa de la UEFA de 2004 permitieron al Valencia ser cabeza de serie en los sorteos de 2000, 2002, 2004 y 2006. Salvo en la campaña 2004/05, la del proyecto fallido de Ranieri, siempre aprovechó ese factor para avanzar de ronda.
Un Mestalla lleno en Europa
El ranking UEFA afecta de lleno a la planificación de la próxima temporada, ya que deparará una altísima exigencia desde septiembre, combinada con el inicio de la Liga, por lo que muy pronto quedarán marcadas las expectivas del año, tanto deportivas como económicas. En el otro lado de la balanza, el grupo será muy atractivo para el espectador, por lo que, junto a una política de precios razonable, Mestalla puede lucir en los meses previos al centenario del club un ambiente mágico. Un objetivo a corregir por parte de Meriton, ya que en la última Champions los «hachazos» en taquilla ofrecieron la imagen desangelada de un estadio con media entrada, uno de los factores para no pasar a octavos.
