Las consecuencias de la trama de amaños de la «Operación Oikos» continúa ensuciando el nombre del fútbol español. Si la semana pasada se conocía las detenciones, entre otros de los exfutbolistas Raúl Bravo y Carlos Aranda, del excapitán del Valladolid, Borja Fernández o del ya expresidente de la SD Huesca, Agustín Lasaosa, esta semana se ha conocido que hasta siete jugadores del conjunto vallisoletano estuvieron implicados en el amaño del encuentro contra el Valencia CF de la última jornada liguera, en el cual ni el conjunto de Mestalla ni sus jugadores participó.

Como ha desvelado el periódico El Mundo en una serie de informaciones, el supuesto amaño se gestó en una barbacoa celebrada en casa de Keko, uno de los supuestos implicados junto a varios de sus compañeros entre los que se encuentra el propio Borja Fernández. Sin embargo, en las últimas horas, la trama se ha alargado hacia otros puntos de investigación. Como resaltaron varios periodistas del citado medio, en las conversaciones registradas horas antes al amaño y pertenecientes a la investigación de la policía, uno de los cabecillas, Raúl Bravo, se mostraba nervioso después de conocer que el Getafe habría ofrecido una prima de dos millones de euros al Valladolid para ganar el encuentro frente al Valencia, un dinero que sería finalmente rechazado por los jugadores.

Reacciones institucionales

Tras conocerse la implicación de hasta siete de sus jugadores, el Valladolid emitió ayer un comunicado en el que resaltó su «total desconocimiento e indignación ante las informaciones aparecidas en los medios», asegurando que el club castellano-leonés tiene «máximo respeto y colaboración con la Justicia y la integridad de la competición». Por ello, en el texto, la entidad recalcó que ha iniciado «una investigación interna a los futbolistas convocados para el último partido de esta temporada» frente al Valencia con el fin de «contribuir a esclarecer los supuestos hechos con la mayor rapidez».

Asimismo, a través del comunicado también quiso explicar que el club se personará «en las actuaciones judiciales actualmente en curso» y ejercerá «cualquier tipo de acción contra cualquier persona o entidad que manifieste o haya manifestado la posible implicación del club en este tipo de conductas ilícitas».

Por otro lado, la Federación Española de Fútbol, con Luis Rubiales a la cabeza, también anunció que va a presentarse como acusación particular en la Operación Oikos, después de conocerse la prima ofrecida por el Getafe y rechazada después en el encuentro entre valencianistas y pucelanos.

Zorío pide la acción de Mateu

Las nuevas informaciones, que han afectado al Valencia CF de forma indirecta y que no supondrán pese a ello ninguna consecuencia a nivel deportivo para la entidad, no han propiciado ninguna reacción más allá de la postura de total desconocimiento y rechazo ofrecida ya por el club la pasada semana.

Sin embargo, esta situación no ha sido compartida por todo el mundo en el entorno blanquinegro. Ayer, a través de un comunicado, el responsable de Marea Valencianista y expresidente del club, Miguel Zorío, exigía a los máximos dirigentes del Valencia CF que se personaran en la causa sobre este amaño de partidos en la liga española. «Es intolerable que la mancha de aceite del dinero sucio manche cada día la clasificación del club para la Champions League y ni Anil Murphy ni Mateu Alemany hagan nada», explicó Zorío.