Por mucho que en la alta competición los clubes y entrenadores tienen a querer tenerlo todo cada vez más controlado y monitorizado desde el punto de vista estadístico, el fútbol termina sacando la patita por algún sitio para decir 'aquí estoy yo'. Maxi Gómez, delantero uruguayo ha acabado por romper con el Valencia CF después de un inicio de temporada titubeante porque no terminaba de adaptarse al juego rápido que en el conjunto de Mestalla instauró Marcelino García Toral.
Maxi ha dado un paso al frente con los dos goles que hizo el miércoles de la semana pasada en el estadio de Mestalla ante el Getafe y con el excelente partido que se marcó en San Mamés, al que solo le faltó la guinda del gol. Pues bien, Maxi jugó ante el Getafe porque se lesionó Kevin Gameiro. Tal cual. El delantero francés tuvo que retirarse en el minuto diez de partido y esa fue la oportunidad que ha aprovechado el delantero uruguayo. Hasta ese momento, Rodrigo y el propio Gameiro le estaban cerrando las puertas de la titularidad hasta el punto que solo tenía minutos cuando tocaban rotaciones.
En San Mamés, y jugando con un 4-4-2 haciendo de referencia para las conexiones de Rodrigo, que actuó de segunda punta, Maxi dio un paso al frente pero es hora de dar otro. Mañana le espera la mejor competición entre clubes del mundo. Los últimos veinte minutos de Stamford Bridge le supieron a poco. Se ha hecho grande en el Valencia, estrenará titularidad contra el Ajax en Mestalla y quiere conseguir el gol que le falta y por el que tanto ha luchado tantos años. Maxi firmó para jugar y marcar en partidos así. «Poder jugar una Champions es algo muy lindo. Yo antes solo la jugaba en la PlayStation y soñaba con vivirlo en primera persona. Siempre trato de marcar goles en todos los partidos, sea en LaLiga, en los entrenamientos, en Champions? Ojalá este miércoles se dé y pueda marcar mi primer gol en Champions».
Cómodo con Celades
El charrúa se encuentra más cómodo con el estilo de juego de Celades y solo tiene palabras de agradecimiento para el entrenador después de los problemas que tuvo para adaptarse al estilo de transiciones rápidas de Marcelino. «Se va viendo al correr de los partidos, es un entrenador que transmite muchas cosas y estoy agradecido de poder tenerlo y de la confianza que me da», decía.
El uruguayo siente que será un partido complicado, pero apela al estado de forma del equipo mostrado en Bilbao y al nivel de confianza del grupo para ganar al Ajax. «Todos los partidos de Champions son muy duros, todos los rivales son duros, pero lo afrontaremos de igual a igual, como lo venimos haciendo. La victoria del otro día era fundamental, merecíamos una victoria así para tener más fuerza para el partido del miércoles frente al Ajax, que será un partido muy duro. Todos los partidos de Champions son muy duros, todos los rivales son duros, por eso están Champions, pero lo afrontaremos de igual a igual, como lo venimos haciendo, como el fin de semana donde logramos los tres puntos y ojalá quede la victoria acá, que sería muy importante».
El delantero cree en la «unión» del equipo para ganar a cualquiera se llame como se llame. «El grupo está muy unido, se habla mucho, transmite muchas cosas y estamos muy fuertes, ojalá que los partidos que vengan sean con victoria, así nos da más confianza y seguimos esa racha». Maxi está convencido de que la ayuda de Mestalla será clave para ganar a los holandeses y hace un llamamiento. «La gente, desde el primer día, nos apoya mucho, es fundamental, ojalá el miércoles vaya la afición, explote el estadio y luche mucho con nosotros, sería fundamental».
