Los hosteleros valencianos registraron en Fallas un ligero retroceso en el volumen de negocio tras más de 10 años de ganancias, según indicó hoy a Europa Press el presidente de la Federación de Hostelería de la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Gelabert, quien puntualizó que el motivo de este descenso, ya previsto, es la crisis económica y la pérdida de poder adquisitivo.

Gelabert expuso que, en general, se ha producido un ligero retroceso en cuanto al gasto medio y al volumen de negocio, en torno al 2,6 por ciento, "después de una década de crecimiento". Y esta situación ha afectado sobre todo a los restaurantes y hoteles ubicados en la periferia, así como a los de alta gama.

Así, a nivel de comercios del centro, se han experimentado en esta semana fallera unos "buenos resultados", y con unos datos "no inferiores a los del año pasado", mientras que, por contra, los alejados del centro histórico "sufrieron unos resultados bastante peores". Este hecho es una prueba de que el sector, puntualizó, "avanza a diferentes velocidades".

Explicó que los días "fuertes" de consumo fueron los 13, 14, 18 y 19 de marzo, mientras que los días intermedios, es decir, el lunes y el martes, "no parecía que la ciudad estuviera en Fallas", puesto que no hubo a penas ventas.

No obstante, para hacer un balance consumo de estas fiestas, Gelabert pidió esperar a que finalice el puente de San José, puesto que, según dijo, uno de cada cuatro viajeros "llegará a la Comunitat Valenciana y producirá gasto". Así, la valoración podría ser más positiva.

En global, Gelabert indicó que hay puntos "optimistas" puesto que, mientras que en Navidades se registró un descenso en volumen de negocio en torno al 25 por ciento, en Fallas esta cifra bajó hasta el 2,6 por ciento, por lo que "ha habido más movimiento".

Esto quiere decir, según apostilló, que en este periodo se ha conseguido reactivar el consumo, a raíz del efecto psicológico suscitado con motivo de una celebración. "Esto son síntomas de que a pesar de encontrarnos en un contexto muy grave de crisis, la gente tiene en la mente que hay que salir a la calle", dijo.