La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, terció ayer en el debate sobre el cierre de los museos los lunes. Preguntada, en concreto, por el llamamiento que han hecho los representantes hosteleros para que la ciudad abra los museos y monumentos los lunes, Barberá recordó que ya abren cuando es festivo y mostró su deseo de "poder abrir todos los días".

Tal como informó este diario, mientras los museos municipales pierden miles visitantes los lunes, otros edificios, en concreto la catedral -que pasa por ser el monumento más visitado de la ciudad y que hace unos años puso al cobro las visitas- mantienen abiertas sus puertas.

La alcaldesa explicó que la decisión de abrir los lunes es sobre todo una cuestión económica. "Abrir el lunes implicaría más horas y más gastos y hay que conciliar este interés, que evidencia el incremento de turismo en la ciudad, con la situación económica y con las plantillas",apuntó.

La alcaldesa aclaró así la postura del ayuntamiento después de que el presidente de la Fundación Turismo Convention Bureau, José Salinas, declinase tomar posiciones hace unos días al ser preguntado por este diario.

Los hosteleros también han defendido la idea de reforzar plantillas para permitir la apertura todos los días dado que se trata de un reclamo turístico de primer orden. Aunque hay otras ciudades donde el lunes es día de descanso para los museos, muchos consideran una oferta museística más amplia reforzaría la imagen turística de la ciudad.