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Tras unos meses complicados por los efectos del terremoto del 11 de mayo en sus viviendas, los niños de Lorca se merecen unas vacaciones. Cincuenta niños llegaron el lunes a Valencia para disfrutar de una semana de ocio en la ciudad. Se alojan en el Casal d'Esplai del Saler y combinarán las actividades al aire libre con excursiones como la que realizaron ayer a la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Antes de conocer el complejo de Calatrava, realizaron una visita guiada por las dependencias del Ayuntamiento de Valencia, donde visitaron el salón de plenos, el salón de cristal y el museo histórico municipal.

"Me gusta mucho Valencia", comentaba Paula. Los niños han sido seleccionados entre las familias más damnificadas por los seísmos. La mayoría de los que están en la excursión perdieron su casa como consecuencia del terremoto. Paula vive ahora de alquiler y confiesa que la casa está "regular". Carla también ha cambiado de vivienda y de barrio. "Mi casa ya no existe, en la nueva estoy bien pero no es igual que antes", declaró. Uno de los monitores que les acompañarán esta semana, Juan Francisco, afirmaba que ahora que están juntos y de vacaciones los niños están bien, pero aseguró que al cambiar de domicilio y de ambiente, pierden a sus amigos de siempre y sufren problemas de adaptación.

"Podrán despejarse de unos meses muy duros, la situación aún es complicada, todos los días hay demoliciones", comentó el concejal de Juventud e Innovación de Lorca, Agustín Llanos, que acompañó al grupo durante la visita al consistorio junto con la concejala de Juventud e Innovación del Ayuntamiento de Valencia, Beatriz Simón y el representante de la Casa de Murcia en Valencia, Blas García Aranda. Fue esta última institución la que impulsó la iniciativa, que ha contado con todo el apoyo del consistorio valenciano, encargado de costear los gastos de alojamiento y manutención de los niños. Por otro lado, una empresa lorquina de autocares ha dispuesto el transporte para los menores también de forma gratuita. Tampoco se pagará nada por excursiones como la de mañana a la Albufera. Será una semana de merecido descanso para estos niños.