Bioparc Valencia está de celebración. Uno de sus animales más emblemáticos, la chimpancé Chispi, cumplió ayer 24 años (la esperanza de vida de esta especie en cautividad es de unos cincuenta). El zoológico regaló a la familia de chimpancés de Bioparc, compuesta por seis ejemplares, una gran tarta helada de 70 centímetros de alto que hizo las delicias de los simios. Los cuidadores dejaron el regalo, hecho con zumo helado, trozos de frutas, gelatinas, bizcochos y un poco de nata, en el recinto exterior antes de que salieran los chimpancés, que se la encontraron como sorpresa.

El primero que se acercó a la tarta fue Napo, el macho dominante. Chispi no se despegó de la tarta, mientras que Kate eligió la parte superior. Napo se concentró en las "velas" formadas por zanahorias y uvas. Eme tiene cinco años y es una de los miembros más jóvenes de la familia: ella se comió lo que le dejaron los demás. El más pequeño es Kimbo, que tiene dos años y nació en Bioparc. Él se dedicó a corretear alrededor de la tarde, para sentarse más tarde con los mayores a comer.