Las hogueras de la Nit de Sant Joan se esfumaron bajo la lluvia. A las 7 horas de la mañana de ayer, las playas de la Malva-rosa y el Cabanyal recuperaron su aspecto habitual después de que miles de personas, cerca de 70.000 según fuentes municipales, celebraran la magia de la noche más corta del año junto a las olas del Mediterráneo. Puede que la noche fuera corta, pero para Policía Local, Cruz Roja, Protección Civil, Bomberos y los servicios de limpieza, la Nit de San Joan conllevó, de nuevo, un intenso trabajo.

Según los datos facilitados por el consistorio, el dispositivo de Cruz Roja atendió un total de 107 personas una docena más que el año pasado la mayoría, el 28 %, por intoxicaciones etílicas. En ocho casos hubo que evacuar a los atendidos a centros hospitalarios, uno de ellos con una contusión grave. Estas cifras son levemente superiores a las registradas en la fiesta del 2013. Entre otras cosas, porque el horario de atención de Cruz Roja se amplió con respecto a la Nit de Sant Joan anterior. En cambio, las comparaciones con otros años son significativas. En 2009 hubo 279 asistencias y en 2010 un total de 309.

Por otra parte, la Policía Local de Valencia llevó a cabo una docena de actuaciones con un balance de tres detenidos por robo con intimidación, seis denuncias por venta ambulante con el decomiso de 165 latas, dos detenidos por superar la tasa de alcoholemia y un detenido por violencia de género.

Residuos más pesados

En cuanto a la limpieza de las playas, la afluencia de público, sensiblemente menor que otros años, desembocó en menos cantidad de basura sobre la arena. A las 5 horas de la mañana 300 operarios iniciaron las labores de recogida, que concluyeron a las 7 horas. Curiosamente, aunque el volumen de basura ha sido esta vez menor que otras veces, su peso ha sido cinco toneladas mayor al de los residuos de 2013. La explicación de esta aparente contradicción se halla en la lluvia que desde las 5 h. hasta las 6 h. empapó los restos de la fiesta y las cenizas de las fogatas, incrementando su peso.

La concejala de Medio Ambiente, Mª Àngels Ramón Llín, y la de Playas, Lourdes Bernal, valoraron positivamente la «tranquilidad» con la que transcurrió la Nit de Sant Joan.

Entre las causas por las que este año ha habido menos gente en las playas de la ciudad, más allá de que la fiesta fuera en un día laborable y hubiera amenaza de tormenta, la ausencia de una verbena también influyó. Prueba de ello es que en la playa de la Patacona, en Alboraia, miles de jóvenes se concentraron para presenciar el concierto del «Xufa Rock».