«Muerto el perro, se acabó la rabia». Así de terminante se mostró ayer el alcalde de Alfafar, el popular Juan Ramón Adsuara, a la hora de calificar el posible fin de la libertad horaria que pretende el nuevo Ayuntamiento de Valencia, dirigido ahora por Compromís. «Las cosas se hicieron mal „dijo en clara referencia al anterior gobierno de Rita Barberá„ porque se tenía que haber permitido la apertura dominical en toda Valencia, o bien prohibirla por completo, pero no dar libertad de horarios a unas zonas de la ciudad y a otras no en función de criterios que nada tenían que ver realmente con la afluencia turística».

Adsuara, mandatario de un municipio que cuenta con la zona comercial más potente de la Comunitat Valenciana, no comparte «en absoluto» cómo se gestionó el tema por parte del anterior consistorio de la urbe ni del Consell que presidía el también popular Alberto Fabra. Ahora, ofrece su «total apoyo» al nuevo regidor de Comercio del «cap i casal», Carlos Galiana. «Lo correcto sería que Valencia acabase con la libertad horaria y sólo pudiese abrir el pequeño comercio del centro histórico, el que de verdad sí está afectado por el turismo, como sucede en casi todas las comunidades españolas», defendió.

En esta misma línea se situó ayer el alcalde de Massanassa, el popular Vicent Pastor, quien sostuvo que «la libertad horaria sólo puede resultar interesante si conlleva la creación directa de nuevos empleos» pero, «dado que no es así», lo prioritario es «abogar por la conciliación». Josep Cabanes, alcalde socialista de Sedaví, también se expresó de forma parecida. «Los trabajadores han de tener derecho a descansar y a conciliar, máxime cuando todos sabemos que la apertura dominical no genera más empleo».

La postura de Aldaia y Xirivella

En Aldaia, el nuevo gobierno municipal, liderado por el socialista Guillermo Luján, también aplaude la voluntad del nuevo edil de Comercio de Valencia de poner fin a una situación que consideran a todas luces injusta. Y, en Xirivella, cuyo gobierno también ha cambiado a otro dirigido por el socialista Michel Montaner, tampoco están a favor abrir dmingos.