Coto a las terrazas y ordenanza para que la zona naranja sea solo para residentes
El concejal de Movilidad y alcalde accidental durante esta semana, Giuseppe Grezzi, advirtió ayer a los hosteleros, enfrentados con los comerciantes del centro histórico por la invasión de terrazas en las nuevas zonas peatonales, de que «si se libera espacio de los coches no es para que haya más terrazas». «Si se recupera un espacio para las personas, debe ser un espacio de calidad para que no pase lo mismo que en Russafa». En este barrio, de reciente reurbanización, se han tenido que poner límites a la proliferación de locales de ocio nocturno y terrazas.
Grezzi aclaró en relación a las licencias a terrazas de bares que «las que tienen licencia están en vigor y el resto se tendrán que analizar» conjuntamente con la Concejalía de Comercio.
En este sentido, el concejal destacó que se va a revisar la ordenanza de la zona naranja —«una de las más caras de España»— para restringirla al uso de los residentes al estilo de otras ciudades como Madrid o Bolonia.
En relación al déficit de plazas de aparcamiento que denuncian los vecinos del barrio del Carmen por la peatonalización el concejal aseguró que son los mismos que había. Descartó la posibilidad de permitir el uso de solares como zonas de aparcamiento y aseguró que «si se crean más plazas en la zona habrá más tráfico».
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