La Gran Fira de València tiene en su dispersión geográfica una virtud y un problema: llega a todas partes, pero obliga al desplazamiento y, sobre todo, a la consulta del programa (cuarenta mil son los libritos confeccionados sólo por el ayuntamiento, más los de empresas patrocinadoras). Tradicionalmente el centro de la ciudad no ha sido un escenario ferial „mucho más se asocia a espacios como la Alameda, Viveros, el puerto o los jardines del Palau, según épocas„. Sin embargo, la parte vieja ha ido ganando peso en los últimos años. Dentro de esa estrategia, el ayuntamiento ha iniciado una campaña con la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico para que la imagen del cartel aparezca por todas partes. La relación entre la concejalía y estos comerciantes no es nada mala: ya en Navidad viraron el foco de atención a esa zona trasladando el belén a la Plaza de la Reina y se plantó un árbol luminoso en Doctor Collado. Ahora, la acción pretende que estos entornos hagan propios el programa de festejos.

La Plaza del Pilar ha sido uno de los primeros centros neurálgicos este año con la celebración de la final del Circuito Café Teatro y la ceremonia inaugural se trasladó a la plaza del Ayuntamiento. En los próximos días habrá actividad con las «Serenates» de la Universitat (incorporadas al programa ferial), espectáculos como el ChaoChochín o cine también en la Plaza del Patriarca, el cine karaoke en la plaza del ayuntamiento o bailes valencianos en las plazas de la Virgen y Carmen. Pero su gran protagonismo será el día 23 con la Gran Nit de Juliol, gran parte de cuyos festejos, incluyendo la cabalgata de inicio serán desde las murallas hacia el interior.

La actividad de hoy tiene su protagonismo, sin embargo, en los jardines del Palau, donde música, juegos de mesa y magia se irán sucediendo de forma secuencial. Empieza, además, el esperado concurso de La Fallera Calavera.