El Ayuntamiento de Valencia presentó ayer la convocatoria pública para la compra de 24 viviendas con objeto de ampliar la bolsa de viviendas públicas para alquileres sociales, con mensualidades que se sitúan entre los 100 y 200 euros. La convocatoria, a diferencia de otras ciudades, no se restringe a los bancos, sino que podrán optar particulares siempre que sus inmuebles cumplan los requisitos que exige la convocatoria, entre ellos, no tener un valor superior a los 50.000 euros.

La Junta de Gobierno Local aprobará el viernes el pliego de condiciones de la convocatoria, que supondrá una inversión de 1,2 millones de euros.Se trata de una medida que cierra el círculo de las iniciativas impulsadas desde la Concejalía de Vivienda, según explicó ayer en rueda de prensa su titular, María Oliver.

Para dar opción a todos los ciudadnos de dar salida a sus inmuebles, la convocatoria no es de lotes de viviendas, sino que se aprueban unas bases con unos requisitos mínimos sobre cada vivienda: la superficie, el estado de conservación y las características del edificio (antigüedad, fachada, escalera y accesibilidad), así como la propuesta económica. De la convocatoria se ha excluido en barrio del Cabanyal porque ahí el Ayuntamiento ya dispone de suficiente vivienda, más de 500, la mayoría pendiente de rehabilitar. Una vez publicada la convocatoria en el BOP se abrirá un plazo de 45 días para que los interesados puedan presentar sus ofertas. «La finalidad es adquirir viviendas accesibles, que estén habitables y no tengan ocupación irregular». El equipo técnico visitará y valorará cada una de las viviendas.