La coordinadora de EU de la ciudad de Valencia, Rosa Albert, criticó ayer que «hace más de un año el alcalde de valencia anunciaba la apertura de la calle Agustín Lara, en Orriols, para facilitar el acceso al tranvía, y a día de hoy parece que todavía no hay solución para una reivindicación vecinal de hace 25 años».

Albert hizo referencia así al conocido como «agujero de la vergüenza», abierto por los vecinos en un muro que hace imposible el paso desde hace más de dos décadas. La coordinadora recordó al actual equipo de gobierno municipal «su compromiso de priorizar las políticas destinadas a dignificar los barrios y atender las reivindicaciones vecinales históricas que garantizan y mejoran la calidad de vida en zonas olvidadas por el gobierno del PP».

«En este caso hablamos además de una cuestión de seguridad», apuntó Albert, para destacar que«no es tolerable que se retrase ni un solo día más la solución para este problema, hay que ser responsables con las declaraciones que se realizan y con los compromisos que se adquieren con la ciudadanía».

Asimismo, incidió en que durante años se ha criticado la inactividad y abandono por parte del anterior gobierno por no aplicar los mecanismos de gestión urbanística de los que dispone el ayuntamiento para abrir la calle firmando convenios con los propietarios para trasladar el aprovechamiento urbanístico a las parcelas edificables del entorno.

«Se ha planteado también realizar expropiaciones parciales pero lo cierto es que a día de hoy no hay una propuesta concreta con plazos de ejecución, desgraciadamente más de lo mismo», sentenció la coordinadora de EUPV.