«Impresentables». Así calificaba ayer Joan Ribó las declaraciones del secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, sobre el túnel pasante, con las que ha querido hacer «una cortina de humo» para esconder «la falta de voluntad» de ejecutar estar inversiones. Gómez-Pomar, reoteraba el martes el compromiso del Gobierno con el túnel pasante de Valencia, pero esgrimiendo que su definición «depende de otra serie de obras previas» relacionadas con el Parque Central. Ribó lamentaba ayer la falta de concreción de inversiones para Valencia del Ministerio de Fomento ya que mientras «se continúa sin abordarse de forma seria el túnel pasante» por Valencia «al mismo tiempo en Barcelona se han iniciado el segundo túnel con un coste superior al que supone el primer túnel para Valencia».

«El ministerio de Fomento y, en general el Gobierno español, están abandonado absolutamente la situación de las infraestructuras de esta ciudad, que están en muy mala situación y que pueden suponer un colapso y un cuello de botella para el futuro Corredor Mediterráneo», advertía. Al respecto, lamentaba que pongan «la excusa» de las obras del Parque Central «no tiene sentido, es una cortina de humo que esconde la falta de voluntad del Gobierno central por abordar unas infraestructuras a las que en su momento se comprometieron pero que no se están cumpliendo».

Por otra parte, la consellera de Obras Públicas, Maria José Salvador, lamentó «una vez más, la marginación del gobierno de España hacia esta Comunitat». «Parece que para el gobierno central la Comunitat Valenciana no existe, es invisible, mientras se sigue invirtiendo en otras autonomías», destacó.

«El gobierno tenía una gran oportunidad en Bruselas de demostrar su compromiso con esta Comunitat solo respaldando la propuesta del gobierno valenciano para que se cumpliera el convenio firmado en 2003. No pediamos que nos dijeran cuando iban a empezar las obras solo que figurara ese proyecto en el plan europeo. Sin embargo, decidieron guardar silencio, no comprometrse y marginar una vez más a la Comunitat», recordó.

Inversión en Barcelona

Mientras la reordenación de la red ferroviaria de Valencia, que incluye el túnel pasante, sigue paralizada, el Ministerior de Fomento acelera las obras de construcción del nuevo acceso ferroviario al Aeropuerto de Barcelona-El Prat. Este proyecto, con una inversión de 272 millones de euros, conectará en 19 minutos la estación de Barcelona Sants con la terminal T1 del aeropuerto de El Prat. El nuevo acceso ferroviario al Aeropuerto tendrá una longitud total de 4.495 m y se iniciará en el enlace con la línea de ancho convencional Barcelona-Tarragona, discurriendo en doble vía hasta la terminal T1, con una parada intermedia en la terminal T2. El elemento más destacado de la nueva infraestructura será un túnel de 3.385 m, de los que 2.830 m se excavarán con tuneladora y los restantes corresponderán a tramos entre pantallas.