El alcalde de Valencia, Joan Ribó, medirá en febrero próximo su capacidad de convocatoria en un «encuentro municipalista por la financiación local» al que ha invitado a un centenar de alcaldes y alcaldesas de toda España. El encuentro, que se celebrará los días 16 y 17 de febrero en el Palacio de la Exposición, llega diez meses después del que impulsó el Consell del socialista Ximo Puig y la Federación Valenciana de Municipios (FVMP) con alcaldes valencianos para reivindicar una financiación justa.

Ribó quiere conseguir el máximo consenso y apoyo de las ciudades para hacer un frente común en la reivindicación de una mejor financiación ante el Gobierno, así como en la necesidad de anular el plan de ajuste del ministro Montoro en las ciudades que, como Valencia, ya cumplen con la ley de Racionalización. Hay que acabar con «los corsés de Montoro», con su regla de gasto y planes de ajuste. «Los ayuntamientos somos las instituciones que menos déficit arrastramos pero, en cambio, a quien más castigan Montoro y Rajoy», afirmó Ribó

El alcalde ha invitado por carta a todos los ayuntamientos que son capital de provincia —y a las dos ciudades autónomas—, a las poblaciones españolas de más de 200.000 habitantes —empezando con Vigo, cuyo alcalde es también presidente de la FEMP— y a las poblaciones valencianas de más de 25.000 habitantes, como por Elda —cuyo alcalde, el socialista Rubén Alfaro, es el presidente de la FVMP— Torrevieja, Alcoi, Benidorm, Vall d'Uixó, Alzira, Ontinyent, Sueca. Se espera igualmente la presencia de los «alcaldes del cambio» como Manuela Carmena, Ada Colau y Pedro Santisteve, con los que Ribó ha coincidido en otros encuentros de alcaldes celebrados en A Coruña, Barcelona y Madrid.

Necesidades y soluciones

«Queremos reunir a un número importante de ayuntamientos para poner en común necesidades y soluciones a las cuestiones del día a día», explicó el concejal de Hacienda, Ramón Vilar, quien aseguró que la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, la Ley Reguladora de Bases del Régimen Local, así como la Ley de régimen fiscal «precisan ya de modificaciones en profundidad, que asuman la realidad del país y de las necesidades y funciones de la administración local».

Ribó quiere modificar el régimen fiscal de las entidades y organizaciones sin ánimo de lucro, de manera que aquellos inmuebles vinculados a la Iglesia, pero con fines lucrativos, dejen de estar exentos del pago del IBI, como ocurre en la actualidad. También aprovechará el encuentro para reivindicar una mayor flexibilidad a la hora de gestionar los tributos locales para garantizar los servicios a la ciudadanía.