«Estamos contentos, ya está la licencia de obras, ha llegado tarde, pero al fin ha llegado», así resume la presidenta del Ampa del Colegio de Infantil y Primaria (CEIP) Número 103 del barrio de Penya-Roja, Raquel Lafarga, la alegría que se vivía ayer en la única escuela pública de la ciudad integramente en barracones. Fue la propia Concejalía de Desarrollo Local la que comunicó por teléfono al Ampa que el edil Vicent Sarrià acababa de firmar el permiso de obras del nuevo colegio.

La tramitación de este expediente ha estado atascada nueve largos meses en el consistorio municipal. Los dos informes que más ha costado conseguir, ambos emitidos desde Madrid, son el visto bueno del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), el ente gestor de la red estatal del ferrocarril, y el de la Agencia de Seguridad Aérea (AESA).

El nuevo colegio se levantará sobre una parcela de los antiguos terrenos de la Cross, cedida por el consistorio junto a la iglesia de los Mártires y el polideportivo que ocupan las antiguas naves industriales protegidas. El informe del ADIF es obligatorio al estar el solar dentro del área de reserva de 20 metros a ambos lados de la vía a Barcelona, antes del inicio de su tramo subterráneo. También era necerario el dictamen de la AESA, pese a que el colegio sólo tiene un piso en altura, al estar situado dentro de la zona de servidumbre aeronáutica del puerto.

Fuentes de la Conselleria de Educación, aunque se mostraron cautas a la hora de ofrecer ayer una fecha de inicio de las obras, señalan que con la licencia del ayuntamiento y toda la documentación que debe trasnsmitirles la Conselleria de Vivienda, ya «esta todo todo preparado para poner en marcha el proceso de licitación de la construcción del colegio».

La conselleria del tándem Compromís-PSPV en el inicio del pasado curso 2015-16 prometió empezar a construir el nuevo colegio antes de que acabara 2016. Algo que no ha podido cumplir por el retraso en la tramitación de la licencia. Hace tres meses, Educación prometió al Ampa que el colegio se empezaría a construir entre marzo y abril, algo que los padres desean que «ojalá se cumpla», subraya Lafarga. El plazo de ejecución de las obras del nuevo colegio es de 18 meses. El anterior Consell del PP no cumplió su anuncio de licitar antes de las elecciones mayo de 2015 las obras.