El grupo inversor británico Princeton Investments ha comprado un edificio de oficinas actualmente en desuso en Valencia, en el barrio del Cabanyal-Canyamelar, para convertirlo en una residencia estudiantil, con el objetivo de que esté remodelado para el próximo curso académico 2018-2019.

Según informó ayer la agencia EFE, la adquisición de este inmueble consolida la estrategia de expansión en el sector inmobiliario español del grupo fundado por la familia Lee, que analiza las oportunidades para residencias estudiantiles en las principales capitales españolas.

El edificio ha sido adquirido con la participación del fondo norteamericano Carey European Student Housing I, LP, gestionado por W.P. Carey Inc., según informaron fuentes del grupo británico.

Este edificio se encuentra en la calle Francisco Cubells, por el cual pasa el tranvía, y dispone de 10.160 metros cuadrados. Es tal su tamaño que ocupa una manzana completa, y una vez remodelado ofrecerá 350 habitaciones para estudiantes universitarios, amplias zonas comunes para quienes se hospeden allí y espacios con diversos tipos de servicios, además de un aparcamiento.

Este diario trató ayer de contactar con la empresa W.P. Carey Inc. sin recibir respuesta para confirmar qué edificio es el que ha adquirido. A pie de calle y sobre los mapas de esa zona, el edificio que cumpliría con estas características sería el bloque vacío de oficinas situado en el número 7, que albergó las dependencias de la Conselleria de Medio Ambiente hasta su traslado a las del complejo del Nou d´Octubre. En su momento este gran inmueble era propiedad de la Mutua de Aparejadores y Arquitectos Técnicos „que lo alquilaba al Consell„, con la que ayer intentó también contactar este diario sin éxito para conocer si seguía siendo suyo y si lo han vendido a este grupo. Así, por el momento, el grupo británico no ha confirmado de qué inmueble se trata.

«Le daría mucha vida al barrio»

La posible llegada de una residencia de estudiantes al barrio fue ayer valorada por sus vecinos. La mayoría coincidieron en que un proyecto de estas características podría impulsar el movimiento económico en una zona plagada de establecimientos de pequeño y mediano comercio.

«Yo creo que le daría mucha vida al barrio, sería positivo. Los jóvenes siempre revitalizan las zonas allí donde viven y hay muchos establecimientos que seguramente agradecerán la llegada de este colectivo», apuntó Inmaculada Barcelona.

Feng Xia regenta un restaurante en la zona. Al ser consultado por el proyecto, expuso que «no es la primera vez que me hablan de algo parecido, me comentaron que también iba a abrir una comisaría de policia o que se iba a convertir un hotel -siempre en referencia al complejo del número 7-. Todo lo que sea traer gente será bueno para nosotros».

«Referente en innovación»

Según el grupo inversor, la residencia será «un referente en innovación y supondrá un cambio de paradigma en el ámbito de las residencias estudiantiles por su diseño orientado a una mayor comodidad del estudiante». Los compradores no han ofrecido más detalles al respecto hasta que el proyecto de residencia esté más avanzado. El grupo Princeton estudia nuevas oportunidades de inversión en las principales capitales españolas como Madrid o Barcelona.

Grandes compras

Princeton inició sus operaciones de inversión en España en 2015 con la compra de un inmueble de 10.600 metros cuadrados en la calle Cuesta de Santo Domingo en Madrid a Telefónica SA, con arrendamiento posterior.

En marzo de 2016 compró a Gas Natural un edificio de 4.000 metros cuadrados en la calle Mazarredo de Madrid para el desarrollo y la creación de un centro de cotrabajo o «coworking», y está siendo totalmente reformado para su inauguración en el segundo trimestre de este año, una vez ha sido arrendado a Regus plc.

También a finales del año pasado Princeton adquirió a Telefónica SA un inmueble de 9.700 metros cuadrados en Madrid, en la calle Irún, que se destinará a viviendas de lujo con vistas al Palacio Real.