El concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Narciso Estellés, manifestaba ayer en relación a la sentencia del Tribunal Supremo sobre la nulidad de la permuta de Tabacalera que considera que este tipo de permutas «deben reunir todos los requisitos legales con el fin de evitar estas situaciones que dañan la imagen de la ciudad. En su día ya hubo sospechas de que el asunto no era muy normal y ahora, nuevamente, el Tribunal Supremo vuelve a anular la operación urgbanística», comentaba Estellés.

La sentencia, incide Estellés, «llega con años de retraso con lo cual ya existen unos hechos consumados».

«El equipo de gobierno del consistorio negocia un acuerdo con la promotora para legalizar las viviendas porque están fuera de ordenación. Somos conscientes de esas circunstancia y vamos a estar vigilantes de que la ley se cumpla y preguntaremos por esta cuestión en la próxima comisión de Urbanismo», manifestaba.

La declaración de un edificio como fuera de ordenación, además de no facilitar las operaciones de compra-venta del inmueble, dificulta a sus propietarios el mantenimiento. Aunque existen diferentes grados de fuera de ordenación, en la mayoría de los casos el ayuntamiento no permite llevar a cabo reformas o modificaciones sustanciales en el edificio más allá de los trabajos de mantenimiento básico.