La diputada socialista en el Congreso, Ana Botella, ha presentado ante la Fiscalía la documentación que certifica las incidencias en las obras de rehabilitación del Palacio del Temple, como la destrucción del Salón de Plenos, que ha calificado de «irreparable destrucción de un patrimonio histórico». La diputada socialista ha tildado de «barbarie» que se destruya el Salón de Plenos para en su lugar situar baños y despachos y que «los restos, los despojos, de esta obra, que debía haber gozado del máximo nivel de protección, se envíen a la actual Diputación Provincial en condiciones muy lamentables». «A pesar de ser desmontado y devuelto íntegramente a la Diputació el daño ya está hecho, ya que el edificio estaba construido a medida del espacio que ocupaba y constituido por un conjunto de elementos estructurales y decorativos de la época en paredes y techo, y no solo era un mobiliario», según Botella.

La Delegación del Gobierno aseguraba ayer que las obras de rehabilitación cuentan con los informes favorables de los técnicos de Patrimonio Histórico, y recordaba que en el primer proyecto de rehabilitación, llevado a cabo por el PSOE, figuraba la demolición parcial del salón de plenos, que no estaba protegido.