El ayuntamiento de València, a través de la concejalía de Bienestar Animal, anunció ayer que municipalizará la gestión del centro de acogida de animales de Benimàmet, y que sacará a concurso la prestación de los servicios de atención como la asistencia veterinaria, apoyo integral, higiene, desparasitación y desinfección.
Así, el ayuntamiento deja de lado la fórmula del convenio para dar el paso a la contratación de una empresa que deberá además ofrecer un núcleo zoológico propio y no superar los 100 animales acogidos en el de Benimàmet, de propiedad municipal.
Esta exigencia es una de las más destacadas, puesto que la masificación de este espacio viene de lejos, con casi 400 animales. El ayuntamiento había planteado adquirir otro refugio pero con esta licitación deberá proporcionarlo la empresa o asociación.
La concejala de Bienestar Animal, Glòria Tello, destacó ayer que con la municipalización de la gestión el ayuntamiento pretende «recuperar el control en una materia san sensible cómo es el bienestar animal de los animales».
De este modo, la concejalía podrá exigir por contrato que se cumplan cada una de las cuestiones a cumplir en el cuidado de los perros y gatos que se recogen de la calle. «Permitirá una transparencia mayor y la realización de una descripción más concreta de los deberes y de las tareas que tendrá que realizar la empresa adjudicataria, que redundará en beneficio de los animales».
Además, habrá una novedad que es la creación de la figura del director veterinario, que será desempeñado por un funcionario y que deberá coordinar el Servicio de Asistencia a los Centros de Acogida y que supervisará la tareas encomendadas a la empresa adjudicataria, como salud, limpieza, gestión de adopciones y esterilizaciones.
Al recuperar la gestión, explicó Tello, se podrá recuperar también la capacidad de firmar convenios con otras instituciones como universidades u otras que quieran colaborar con el ayuntamiento en investigación o proyectos de mejora de las condiciones de los animales.
Asimismo, Glòria Tello explicó que habrá un «control absoluto» sobre la salud e higiene de los animales acogidos y se obligará a la empresa adjudicataria a que cuente con un plan de adopciones y un núcleo zoológico propio autorizado. Además, exigirá que el centro municipal de Benimàmet no supere en ningún caso los 100 animales acogidos, una cifra muy lejana a la actual, donde la protectora Modepran debe gestionar casi 400 animales, más de 250 perros y más de 100 gatos.
Participar en Plan Felino
Otra de las novedades ayer anunciadas por Tello fue que además el contrato incluirá la prestación de los servicios al Centro de Avifauna Urbana y Animales Exóticos de Natzaret, que según aseguró la concejala, «el PP no dotó de presupuesto».
El trabajo que deberá llevar a cabo la adjudicataria irá más allá, puesto que participará en el Plan Colonia Felino, y se valorará la oferta con un mayor número de esterilizaciones.
La concejala de Bienestar Animal insistió en la «política de sacrificio cero implantada en el Ayuntamiento de València desde el comienzo del mandato actual, con lo cual se garantiza que no se practicará la eutanasia a ningún animal, salvo que sea humanamente necesaria por el estado del animal, una decisión que en ningún caso tomará el veterinario de la empresa, sino que lo determinará el director veterinario municipal con criterios acordados por la concejalía».
