Las quejas presentadas al ayuntamiento con motivo de las molestias derivadas de las Fallas han descendido un 62% respecto al año pasado. Así se desprende de una respuesta del concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, a las preguntas realizadas desde el grupo municipal del Partido Popular al respecto del número de quejas recibidas.

De esta forma, y a pesar de que este año la afluencia de gente a las fiestas josefinas fue mayor, se registraron 56 quejas vecinales, mientras que en 2016 fueron 148, lo que supone una bajada del 62%.

Desde la concejalía de Cultura Festiva atribuyen esta mejora «a los esfuerzos de las comisiones falleras, la Junta Central Fallera y el Ayuntamiento, así como de las entidades vecinales, al trabajo desde el diálogo y la cooperación por una buena convivencia entre los falleros y el resto del vecindario».

El Partido Popular preguntó a la concejalía cuáles son las actuaciones realizadas y la naturaleza de las mismas, así como si los problemas señalados por vecinos se resolvieron durante los mismos meses de marzo, o si se ha remitido contestación por escrito a los afectados.

La concejalía no aporta esos datos, pero responde que las actuaciones llevas a cabo de forma inmediata durante los días de las Fallas suelen ser las que lleva a cabo la Policía Local, y en su caso la delegación de incidencias de la Junta Central Fallera, por lo que remite a la concejalía de la Policía Local y al Consell Rector de la JCF las preguntas para conocer las que se resolvieron en las fiestas.

Asimismo, desde el departamento de fiestas del Ayuntamiento de València indican al Partido Popular que a aquellas personas con quejas que no han sido resueltas de forma inmediata se les ha respondido dede Cultura Festiva a través de notificación electrónica.

«Nueva política de mediación»

El concejal responsable de este departamento, Pere Fuset, se mostró «muy satisfecho por el esfuerzo de las comisiones falleras pero también por los resultados de una nueva política de mediaciones y reuniones previas entre las partes para evitar conflictos».

Del mismo modo, Fuset destacó «la entrada en vigor de nuevas medidas del bando municipal, que han supuesto como resultado una espectacular bajada de las reclamaciones, de las quejas, precisamente en el año en que la ciudad de València ha tenido una mayor afluencia de público».