La primera teniente de alcalde y concejala de Turisme del Ayuntamiento de València, Sandra Gómez, ha asegurado que no teme que las protestas violentas contra el turismo que se han dado en otras ciudades españolas estos días lleguen a la capital del Turia. «Aquí el turismo no está generando una fricción real, el Plan Estratégico de Turismo fue aprobado con la unanimidad de todos los grupos municipales, el sector turístico y los agentes sociales entre los que se encuentra la Federación de Vecinos», aseguraba.

La alcaldesa en funciones explicaba que las protestas contra el turismo están «muy localizadas en Cataluña» y subrayaba que València rechaza «cualquier tipo de manifestación violenta». «De haber manifestaciones deberían ser por parte de los vecinos de aquí; nosotros aceptamos cualquier tipo de crítica pero los grupos violentos no son bienvenidos en la ciudad», argumentaba.

Asimismo, explicaba que el objetivo del consistorio en materia de turismo es «posicionar a València como destino sostenible, desarrollar políticas para mantener la esencia de los barrios atractivos y evitar que acaben destinados solo al turismo». En este sentido, la concejala ha considerado que València «todavía está lejos de la situación preocupante de otras ciudades que reciben muchos más visitantes».

Además, Gómez recordaba que el turismo «genera riqueza» y supone «el 14 por ciento del PIB de la capital» y, por lo tanto, si no existiera, «habría problemas mucho más graves». El president de la Generalitat, Ximo Puig,aseguraba en la misma línea que «aquí no hay un problema» con la masificación turística que, a su juicio, pueda derivar en una situación conflictiva. «Nuestra posición es evidentemente contraria a cualquier violencia, no hay ningún motivo para que se produzca».

Por su parte, el presidente de la Asociación Empresarial de Apartamentos Turísticos de la Comunidad Valenciana (Apartval), José Benavent, expresaba ayer su apoyo a las medidas contra la saturación de los apartamentos ilegales. Benavent hizo estas declaraciones en relación a las nuevas medidas anunciadas por parte del Ayuntamiento de València, entre las que se encuentra la aplicación de una tasa municipal para los apartamentos turísticos, así como la imposición de un límite de días para alquilarlos. Según un comunicado de Apartval, el presidente de la asociación declaraba que les parece «perfecto» que se luche contra la saturación de los apartamentos ilegales «que proliferan por la ciudad y que tanto daño hacen al sector, al Consistorio, a los vecinos y a la economía transparente y adecuada».