Una delegación del Ayuntamiento de València y la Generalitat trasladará el viernes al Ministerio de Fomento una propuesta para reducir entre un 50 % y un 60 % el impacto sobre la huerta en la ampliación de la autovía A-21 Valencia-Puçol de dos a tres carriles.

La propuesta se realizará tras el Pleno del Ayuntamiento en el que se acordó "instar al Gobierno Central al mantenimiento de la inversión estatal aprobada para el proyecto, realizando un estudio previo que favorezca la movilidad colectiva y sostenible de futuro", según ha comunicado el consistorio.

El alcalde de València, Joan Ribó, ha recordado que es necesario "mantener la inversión de las obras" pero "sin arrasar con la huerta de València y Alboraia", para "dar luz verde a una infraestructura que la ciudad espera desde hace demasiados años".

Ha añadido que "lo que sí hay que impedir es la construcción de un acceso Norte al Puerto, que llenaría de camiones los barrios marítimos, además de destruir la huerta".

Ribó también ha calificado la propuesta como "seria, válida y que defiende los intereses de la ciudad tanto en infraestructuras como en conservación del paisaje y medio ambiente" a través de estudios "ya realizados" que reducen la afección a la huerta de las obras.

"En ningún momento se pide paralizar ninguna inversión en la V-21", ha asegurado, al tiempo que ha explicado que "un modificado del proyecto" no implica "repetir todo el procedimiento ni retrasar excesivamente la obra".

La delegación del Ayuntamiento que acudirá al Ministerio de Fomento estará formada por la concejala de Patrimonio, María Oliver, el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Vicent Sarrià, y el asesor del alcalde en materia urbanística.