n El Ayuntamiento de València tendrá que integrar en su plantilla o indemnizar a los trabajadores de Cruz Roja que desde hace años prestan servicio en el Centro de Atención a la Inmigración (CAI), un servicio municipal situado en la calle del Pozo. Cuatro trabajadores elevaron su reclamación al juzgado y este les ha dado la razón, aunque por el momento seguirán prestando servicio en las mismas condiciones hasta que la sentencia sea firme, pues todo apunta a que habrá recurso.

El CAI de València tiene como función desde hace dos décadas atender a los inmigrantes que no tienen protección administrativa ni medios de vida. Ese trabajo se hace conjuntamente por trabajadores municipales y por trabajadores de Cruz Roja. Y así han estado durante todos estos años, hasta que cuatro de ellos decidieron pedir que se consolidara su plaza como trabajadores municipales, ya que hacían un servicio municipal en locales del propio Ayuntamiento de València.

Ahora un juez les ha dado la razón y ha decretado su incorporación a la plantilla municipal o bien su indemnización si finalmente el consistorio insistiera en prescindir de ellos.

Por lo pronto, no obstante, no habrá cambios en su trabajo. Según fuentes de Cruz Roja, estos cuatro trabajadores seguirán haciendo su labor como hasta ahora hasta que haya una sentencia judicial firme.

El CAI de València realiza labores de orientación y asesoramiento para personas individuales y familias inmigrantes residentes en la capital, muchas veces derivadas de los servicios sociales municipales. Por este motivo han contado siempre con la colaboración de Cruz Roja, que es una de las entidades más comprometidas en esta labor.