Los debates y actividades organizadas por la Federación de Asociaciones de Vecinos de València (FAVV) con motivo de la Semana Ciudadana están «invitando» al Ayuntamiento de València a mover ficha ante algunos de los problemas que siguen sin resolverse en los barrios de la ciudad.
Uno de ellos es el de la proliferación de los apartamentos turísticos y los problemas colaterales de esta actividad, como el encarecimiento de los alquileres residenciales o conflictos de convivencia. En El Cabanyal, en pleno proceso de recuperación de barrio, los vecinos ya comienzan a detectar una expansión peligrosas de los pisos destinados a usos comerciales.
Por ello el Govern de la Nau prepara medidas específicas que pongan coto a un crecimiento descontrolado de este fenómeno, según anunció la concejala Sandra Gómez durante la mesa redonda celebrada ayer en el Ateneo Mercantil sobre «Turismo, Ocio y Ciudad».
«Es verdad que en la franja del marítimo estamos viendo cómo hay una fuerte expansión de los apartamentos turísticos, pero el problema es que con la norma general del Plan General de Ordenación Urbana no se podía hacer mucho», admitió Sandra Gómez, titular de la cartera de Turismo.
«El PGOU establece el uso comercial de plantas bajas y primeras plantas, precisamente el tipo de edificación más habitual en El Cabanyal, por lo que estamos redactando medidas específicas que se incluirán en el Plan Especial en el que se limitarán los apartamentos turísticos teniendo en cuenta las condiciones del barrio. No sabemos si se hará con números clausus u otro tipo de medidas», añadió la edil socialista.
Gómez, a preguntas del representante de Russafa Descansa, también admitió que el Ayuntamiento de València podría elaborar un plan especial para l´Eixample «porque entendemos que tiene que tener una regulación específica», ya que los apartamentos turísticos han proliferado de manera espectacular en los últimos tiempos en este barrio.
El Ayuntamiento de València ha consultado con la Abogacía de la Generalitat si la nueva Ley de Turismo, aprobada recientemente, se puede aplicar de manera retroactiva en los apartamentos turísticos de Russafa que se inscribieron en el registro de la Generalitat sin cumplir las normas urbanísticas de la ciudad.
Sandra Gómez, sin embargo, no es muy optimista respecto a esta cuestión, ya que la Abogacía ya ha revocado otras actuaciones, como las medidas de cierre cautelar que ha llevado a cabo el consistorio contra pisos turísticos conflictivos, «ya que con la anterior ley los ayuntamientos no teníamos capacidad de control».
Russafa Descansa calcula que el 80 por ciento de las viviendas comerciales estarían fuera de los criterios legales actuales. «Al menos, desde que ha entrado la nueva ley, sabemos que el problema no se va a hacer más grande», aseguró la también teniente de alcalde.
Mesa del Turismo y Ocio
Durante el debate organizado por la Federación de Asociaciones de Vecinos, el responsable del área de Contaminación Acústica de la Federación, Toni Cassola, pidió la creación «de un observatorio para planificar todo lo relacionado con el ocio y el turismo de la ciudad de la mano de todos los actores implicados», desde los representantes del sector, hasta las universidades, los jóvenes, los vecinos y los consumidores.
El portavoz vecinal insistió que debe ser un foro «donde disponer de datos, informes y, como decía, donde mantener un diálogo genuino, con capacidad para lanzar propuestas, hacer recomendaciones y marcar objetivos. Pero no solo de crecimiento, sino, sobre todo, de sostenibilidad, de consenso y de compromiso social».
Ante esta petición de la Federación, la concejala de Turismo, aseguró que desde su grupo tienen «intención de llevar hacia adelante esta propuesta».
«Se ha hablado de otros propuestas como el alcalde de noche -iniciativa de la Federación de Ocio y Turismo (Fotur)- o la creación de una mesa con todos los agentes representados, y desde nuestro grupo «queremos llevarlo adelante, aunque nuestra idea es que vaya más allá de un mero observatorio, sino que sea un órgano de resolución de conflictos», dijo la edil socialista.
Sandra Gómez abogó por encontrar el «equilibrio» para la actividad turística: «El turismo es positivo siempre que lo ordenemos y los controlemos, y hay que recordar que genera el 15% de la riqueza de la ciudad. Es tarea de administraciones que el turismo sea sostenible para maximizar lo bueno y minimizar lo malo».
