El servicio de mobilitat sostenible del Ayuntamiento de València ha puesto en servicio esta mañana dos contadores de bicicletas en el Pont de Fusta, donde se ubica uno de los carriles bici más usados de la ciudad, ya que conecta el Anell Ciclista y Ciutat Vella con el distrito de La Saïdia y Benicalap. Las funciones de los dos contadores (uno a cada extremo del puente) solo tienen carácter informativo, pero según explica la concejalía de Mobilitat Sostenible la instalación de estos dispositivos pretende «animar» a los usuarios a pasarse a este medio de transporte, ya que el goteo constante de nuevos ciclistas ayuda a ver a otras personas que es un modo de locomoción cada vez más usado.