La empresa Lime ha acudido esta mañana a la central de la Policía Local de València para retirar los más de cien patinetes eléctricos requisados de las calles de València por no disponer de la licencia correspondiente para ocupar la vía pública y ejercer la actividad de alquiler. La empresa ha abonado más de 5.000 euros de las tasas de retirada, quedando pendiente el montante de la sanción principal.

La empresa ya ha sido notificada y tiene dos opciones: seguir el procedimiento abreviado, reconocer que ha cometido una infracción y poder acogerse al descuento del 40 por ciento que prevé el procedimiento o recurrir. En cualquier caso, no cabe negociación sino seguir el procedimiento sancionador. Así, tiene que hacer frente al pago de 33.000 euros por las 44 actas abiertas, a razón de 750 euros por cada una.

En la actualidad, Lime trata de regular su situación en València mediante una modificación de su solicitud de licencia para adaptarla a las actuales ordenanzas municipales. Está por decidir, sin embargo, el futuro de esa sanción y las obligaciones de la empresa en cuanto a ocupación de la vía pública y el consecuente pago de unas tasas.