La subasta de los 24 solares de uso residencial y terciario de titularidad pública incluidos en la primera fase del Parc Central, que se espera como agua de mayo para paliar la difícil situación financiera de la Sociedad València Parc Central, tendrá que esperar hasta final de año.

El consejo de administración de la Sociedad València Parque Central que se celebrará hoy y al que asistirán el secretario de Estado de Infraestructuras, Pedro Saura, el alcalde de València, Joan Ribó, y la consellera de Vivienda, María José Salvador, está previsto encargar a la comisión ejecutiva de la sociedad que inicie los trámites para la enajenación de estas parcelas con el objetivo de aprobar el plan de ventas «antes de final de año» y empezar a vender los solares entre 2019 y 2020.

En la reparcelación de la primera fase del Parc Central la Administración obtuvo una edificabilidad de 135.000 m2 repartidos entre Adif, la Sociedad Parque Central y el Ayuntamiento de València.

La venta de las parcelas lucrativas está pendiente del proyecto de urbanización para dotarlas de los servicios necesarios (luz, agua, telecomunicaciones) para ponerlas en el mercado como solares urbanos. Dicha urbanización, cuyo coste estimado se ha cifrado en 1,5 millones de euros, depende, a su vez, de las obras del nuevo centro de transformación de Iberdrola previsto en este entorno.

Tampoco se dará luz verde todavía a la refinanciación del crédito que lleva meses solicitando el ayuntamiento para reducir los costes de la deuda que tienen que asumir las administraciones entretanto la operación urbanística asociada al soterramiento de las vías y el nuevo Parc Central empieza a generar ingresos.

Otro de los asuntos más esperados en la reunión del consejo de hoy, que el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, avanzó en la inauguración de la primera fase del Parc Central el pasado mes de diciembre es el nuevo convenio para la solución ferroviaria de València.

Todo apunta, sin embargo, a que Fomento presentará en la reunión del consejo de administración hoy un borrador del protocolo de intenciones para la financiación de las obras ferroviarias pendientes. Un borrador de protocolo que contempla la posibilidad de acudir a convenios diferenciados para cada una de las obras ferroviarias a ejecutar.

El objetivo es evitar desfases en los costes de las obras y ajustarse a las nueva exigencias legales sobre la vigencia de estos convenios, que en principio no puede exceder de cuatro años. El primer convenio específico para las obras ferroviarias será el del soterramiento de la playa de vías (canal de acceso), cuyo presupuesto actualizado elevada la inversión necesaria para su acometerla a 395 millones de euros.

La financiación de esta infraestructura que Fomento considera una obra de mejora urbana se financiará, según se ha publicado, al 50 % por el Estado, mientras que Generalitat

El protocolo de intenciones del nuevo convenio para la solución ferroviaria de València, que sustituirá al de 2003, no estará listo hasta el mes de marzo, según ha podido saber este diario, un retraso que el alcalde, Joan Ribó, de Compromís, reprocha a los socialistas, que lo justifican por el reajuste de los costes de las obras.