El gobierno municipal del tripartito (Compromís, PSPV y València en Comú) han sacado adelante esta mañana en el pleno, con los votos a favor de Ciudadanos, la aprobación del nuevo plan del Cabanyal y su salida a exposición pública para la presentación de alegaciones. Finalmente, el PP y la concejala del Grupo de los No Adscritos, María Dolores Jiménez, han votado en contra (en la comisión de Desarrollo Urbano previa se abstuvieron) dejando en evidencia su rechazo al nuevo plan sin derribos, con 750 nuevas viviendas y un hotel de hasta 15 alturas impulsado por el nuevo gobierno local.
El concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, ha anunciado que se harán todos los esfuerzos necesarios para la aprobación provisional del nuevo intrumento de planeamiento, que sustituye al derogado plan de la prolongación de Blasco Ibáñez del PP, antes de que acabe la legislatura. Sarrià ha destacado que con la salida a exposición pública del nuevo plan tras meses de tramitación y búsqueda de consensos "estamos ante un hecho histórico" y "simbólico". Sarrià se ha defendido de las críticas del PP y de Ciudadanos por el retraso en la ejecución de los planes de rehabilitación y las inversiones esperadas para el barrio destacando los avances que se han hecho que aunque "insuficientes son innegables".
El concejal del PP, Alfonso Novo, ha criticado el aumento de la densidad residencial en el nuevo plan criticando el futuro hotel de 15 plantas que, ha dicho, "no es justo ni necesario".
