Enésima alerta sobre el estado de l'Alqueria de Falcó, esta vez por parte del Síndic de Greuges, quien ha recomendado al Ayuntamiento de València que «acelere» la adopción de medidas «para frenar el deterioro» y «mantenerla en un adecuado estado de conservación». La construcción, situada en el barrio de Torrefiel, y que se encuentra en el camino de Moncada, es un ejemplo del barroco de la arquitectura rural valenciana. Pasó a manos del consistorio en 2017, tras años de abandono, incendios y ocupaciones que acabaron deteriorando sus muros y elementos constructivos de forma alarmante este Bien de Relevancia Local.

En un plan de actuación

La recomendación del Síndic tuvo contestación por parte de los responsables municipales, que recuerdan que desde 2015 el Servicio de Arquitectura ha realizado un plan de intervención en edificios municipales con valor patrimonial, entre el que se incluye l'Alqueria de Falcó. Según la respuesta del consistorio, que se reproduce en el escrito del Síndic, «tras diversas inspecciones se ha observado la necesidad de realizar una intervención de reducción del deterioro y análisis estructurales previos para el Proyecto de Rehabilitación».

Además, y mediante un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y la Universitat Politècnica de València, se ha realizado «el levantamiento del estado con el fin de obtener la máxima documentación previa a cualquier redacción del proyecto de rehabilitación». Según el Ayuntamiento de València, la actuación prevista ha sido considerada «importante desde el principio» y forma parte también de las propuestas de Participación Ciudadana «Decidim». También se incidía en que existe una partida presupuestaria para los análisis estructurales previos que complemente la documentación antes citada y permita la intervención de conservación y reducción de deterioro en 2019, así como iniciar la licitación de la redacción del proyecto básico y de ejecución.