La rotonda de entrada a El Palmar está siendo reformada por segunda vez en los dos años que lleva operativa. En esta ocasión se está ampliando el espacio destinado a la parada de autobuses, un particular "punto negro" de este cruce de última generación, que generaba retenciones cuando el servicio público se detenía para prestar el servicio.

El Grupo Municipal Popular atribuye también la obra al mismo motivo por el que se rebajó la mediana meses atrás: la imposibilidad de acceso que tienen los vehículos agrícolas dada esa estrechez de calzada.

En estos días de cosecha del arroz se ha demostrado que estos vehículos tienen incluso que invadir el carril contrario para transitar en determinadas zonas.

La concejal Julia Climent, ha denunciado que "la falta de previsión y el no escuchar a los agricultores y vecinos de las pedanías y Pobles del Sur de Valencia por parte de los Gobierno del Ayuntamiento y los responsables de la Conselleria, provoca que ahora tengan que deshacerse parte de las obras de la rotonda de acceso a El Palmar al tener dificultades para pasar los tractores y cosechadoras del arroz por el estrechamiento de la calzada.

Cliemnt ha recordado que "una gran parte de la actividad económica y del empleo de esta zona de Valencia, pegada al parque natural de l´Albufera, dependen del buen funcionamiento de la principal vía de comunicación que tienen: la CV-500".