La Confederació d´Empresaris del Comerç, Servicis i Autònoms de la Comunitat Valenciana, Confecomerç CV ve inadecuada la instalación de "un semáforo de coronavirus" por barrios, con el fin de informar a los vecinos de cada zona del nivel de contagios, dado que genera inseguridad y alarma, y supondría reducción drástica de clientes en los comercios y hostelería de los barrios marcados, aunque sean establecimientos que no estén afectados por coronavirus, y con un riguroso cumplimiento de las normas de seguridad establecidas para evitar contagios.

Esta iniciativa fue planteada por la concejala del Ciclo Integral del Agua Elisa Valía y publicada el lunes por Levante-EMV, pero no ha sido bien recibida por los comercios que entienden que contribuiría a crear "guetos" en la ciudad y alejaría a los clientes de los barrios con más incidencia.

La Confederación señala que si lo que se pretende es la concienciación ciudadana, "la solución no pasa por poner un semáforo que discrimine los barrios como guetos". El control del aforo, el uso de las mascarillas, mamparas, etc, evita el contagio en el pequeño comercio, pero una medida de este tipo "no discrimina entre espacios seguros y los que no lo son, por el contrario, genera incertidumbre sobre un barrio completo y perjudica directamente a las actividades económicas y sociales que se den en el mismo".

Una vez señalado un barrio, informan los comerciantes, "crearía una alarma tal entre la ciudadanía que le costaría librarse de la consideración como “zona infectada”, incluso cuando redujera el porcentaje de contagios". Además, la movilidad dentro de la ciudad está permitida y esta iniciativa evitaría la entrada, "pero no la salida de vecinos hacia otras zonas".

El presidente de Confecomerç CV, Rafael Torres ha señalado que “el Ayuntamiento debería apostar por iniciativas que no dieran lugar "a equívocos, ni a malentendidos al pretender exhibir esos semáforos en escaparates del tejido asociativo de la ciudad, generando por tanto un clima de desconfianza y una sensación de inseguridad en el cliente”. Además, Torres pone de relieve la necesidad de que el consistorio cuente previamente al anuncio de este tipo de propuestas con las organizaciones del comercio, "a fin de poder fomentar una mayor participación a la hora de tomar decisiones en las que se pida colaboración del sector”.