El alcalde de València, Joan Ribó, se ha mostrado a favor de los arcos chinos de la calle Pelayo más allá de que los vecinos hayan iniciado una recogida de firmas y ya hayan recabado casi el doble de los apoyos que esos mismos arcos tuvieron en los Presupuestos Participativos. A su juicio, no se trata de hacer un referéndum o ver quién recoge más firmas, sino de una propuesta reglada que además viene a poner en valor la cultura china dentro de la ciudad y particularmente en este barrio en el que se concentran una gran cantidad de negocios chinos. «Lo que ha salido en los Presupuestos Participativos se ha de adaptar y se han de resolver los problemas, como se ha hecho con el tema de la pilota, pero no se descarta nada», dijo.

Ribó se pronunciaba así acerca del «conflicto» que se ha creado alrededor del «Chinatown» de Pelayo, que salió adelante en los Presupuestos Participativos con 342 apoyos y que ahora se ha visto rechazado, por el momento, con más de 500 firmas de vecinos del barrio.

«No es una cuestión de hacer un referéndum sobre el tema -dijo. Nosotros hemos establecido unos presupuestos participativos, con unas normas, y han salido una serie de cosas. Ha habido un problema con el tema de la pilota, al que efectivamente le vamos a buscar una solución, pero yo creo que es importante resaltar la importancia de toda la cultura china en este barrio y en muchos otros de València. Estas cosas nosotros las trabajaremos pero no es una competencia de firmas, aquí no vamos a hacer un referéndum si o no, aquí ha habido unos presupuestos participativos, ha aparecido esa propuesta y a partir de ahí iremos trabajando para resolver los problemas», explicó el alcalde.

Ribó insistió «en la importancia de toda la cultura china en este barrio y en toda la ciudad de València». «Y es importante que la valoricemos -añadió-, de la misma manera que podría hablarte del Pakistán o de muchas otras zonas. Pero en este caso, en este barrio hay una gran concentración de entidades y empresas alrededor del tema chino», recordó.

Personalmente, el alcalde cree que «no hay que darle más importancia al tema» y «desde luego, lo que no vamos a hacer es competiciones a ese nivel», en referencia a los apoyos logrados por el proyecto y las firmas recogidas en contra.

«Lo que ha salido en los presupuestos participativos se ha de adaptar, se han de resolver los problemas. Ha habido una serie de problemas concretamente con el tema de la pilota y buscaremos solución, pero no descartamos nada», concluyó.

Apoyo de la comunidad china

Entre tanto, la comunidad china en València sigue muy volcada con este proyecto, que siendo idea de un ciudadano normal, administrativo de profesión y militante de Compromís, ha sido apoyado sin fisuras por todas las entidades establecidas en la ciudad.

Ayer mismo recibió todo tipo de parabienes del presidente del empresariado chino en València, Chistopher Chen, quien se reunió con el concejal de Turismo e Internacionalización, Emiliano García, y mostró su apoyo sin fisuras a la iniciativa de los arcos de Pelayo.

A su juicio, puede ser un reconocimiento a la cultura china y un elemento dinamizador del turismo en la ciudad, un aspecto en el que también estaría de acuerdo el propio ayuntamiento. De hecho, todo parece indicar que el concejal Emiliano García se reunirá la próxima semana con los responsables del Trinquet de la calle Pelayo con ese mismo objetivo. La idea es que el «Chinatown» que se aprobó en los presupuestos participativos sea compatible con el denominado «carrer de la pilota», que consistiría, según la propuesta de la Federació de Pilota, en peatonalizar el tramo de Pelayo en el que está el trinquet y crear allí una especie de paseo de la fama donde practicar también este deporte autóctono. Sería cuestión de mover uno de los dos arcos a otro lugar.