Uno de los puntos negros de la Seguridad Vial de las ciudades es el atropello de peatones, muchos de ellos mortales o incapacitantes. Y València no es una excepción, de tal manera que la Policía Local ha lanzado de nuevo una campaña en redes sociales en la que retrata al peatón como la pieza más débil dentro de la "jungla" de tráfico que es la ciudad. Además, prepara un plan de reordenación de la seguridad vial de la ciudad en el que el peatón es un protagonista destacado y que, de forma general, quiere alcanzar en 2030 el objetivo de "cero" víctimas de tráfico.

Según datos de la Policía Local de València, en esta ciudad hay poco más de un atropello diario con la suficiente gravedad como para quedar registrado por las fuerzas de seguridad. Son cifras globales similares a las del año pasado y muy por debajo del año 2019, año de referencia previo a la pandemia. En lo que va de ejercicio se han registrado 269 atropellos con una víctima mortal, mientras que el año pasado hubo 368 atropellos con 3 muertos; en 2020 hubo 261 con 5 víctimas mortales; y en 2019 se llegó a 454 con 9 fallecidos.

El móvil, responsable

Por lo general, los responsables de estos accidentes son los vehículos, pero también hay una parte importante en la que la responsabilidad es del peatón. Y el teléfono móvil tiene mucha culpa. Al parecer, son cada vez más frecuentes los atropellos a personas que cruzan sin prestar atención al tráfico porque van mirando la pantalla de su teléfono.

No son especialmente relevantes, según las fuentes, los atropellos de patinetes. Del total de la siniestralidad de la ciudad, sólo el 9% los causan estos vehículos de movilidad personal y de ese nueve por ciento, apenas el 8% son atropellos a viandantes. En uno de cada cuatro casos, los accidentes los tienen ellos solos.

Ante esta situación, la Policía Local ha puesto de nuevo en marcha su campaña de apoyo al peatón, pero además se prepara una reforma completa de la seguridad vial de la ciudad con atención especial a los viandantes. En este sentido, el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, ha explicado a Levante-EMV que se harán cambios en la División de Seguridad Vial nombrando un nuevo comisario principal y fusionando el departamento de Atestados. Así mismo, se ha elaborado un Plan Estratégico de Seguridad Vial y se analiza la siniestralidad para localizar los puntos negros.

El objetivo, según Cano, es alcanzar en 2030 el objetivo de "cero víctimas mortales por tráfico".