"Nos van a arruinar", declara el gerente del balneario de la Alameda, Javier Vázquez, a este periódico tras conocer la decisión de la Concejalía de Sanidad y del Ayuntamiento de València de ordenar el cierre cautelar del balneario de la Alameda por no tomar las medidas higiénicas que le fueron impuestas en el mes de mayo y seguir teniendo presencia de legionella en las instalaciones, lo que representa un "riesgo inminente y extraordinario para la salud pública". 

El gerente del balneario, que asegura no tener constancia ni haber recibido ninguna notificación al respecto, declara que esta medida forma parte de "una estrategia política y económica de acoso y derribo por parte del Ayuntamiento de València para quitarnos de en medio y poder volver a sacar la concesión".

Asimismo, Javier Vázquez afirma que los resultados de las analíticas realizadas en el balneario son "correctos" desde hace meses. "Nosotros hemos hecho todo lo que nos han pedido -subraya Vázquez-. Sin embargo, el Ayuntamiento de València no ha hecho nada".

El gerente del balneario tilda la actuación acometida por el consistorio local como "un escándalo de proporciones bíblicas" que supone un "descrédito absoluto" con el fin de "masacrar" a un contratista. Además, advierte que sospecha "qué empresa ha sido" y "esto no va a quedar así".

Por último, Javier Vázquez apunta a que esta decisión es la respuesta del Ayuntamiento de València a una denuncia que presentó el balneario de la Alameda contra el consistorio ante la Fiscalía hace dos semanas. "Ahora nos lanzan encima a Sanidad".