Antonio Escario más allá de "La Pagoda"

El CTAV exhibe los dibujos y bocetos artísticos de Escario, arquitecto de la alta burguesía valenciana que proyectó una docena de edificios en la capital

Torres de la Universidad, a espaldas del hospital Clínico, edificio obra de Escario de 1976.  milena villabba

Torres de la Universidad, a espaldas del hospital Clínico, edificio obra de Escario de 1976. milena villabba / hortensia garcía. valència

El Colegio de Arquitectos de València (CTAV) rinde homenaje en una exposición comisariada por Carla Santieri que se puede ver hasta el 18 de febrero, en la sede ubicada en Hernán Cortés 6, a Antonio Escario (Albacete 1935-València 2018) , reconocido «Maestro de Arquitectura» que dejó una docena de obras en la capital valenciana, como la torre Ripalda («La Pagoda»), icono arquitectónico que sobresale entre otros «Escario» menos conocidos.

Torres de la Universidad, a espaldas del hospital Clínico, edificio obra de Escario de 1976.  milena villabba

Interior del edificio de la Tesorería de la Seguridad Social, en la calle Colón. milena villalba | LEVANTE-EMV / hortensia garcía. valència

La exposición muestra la faceta más artística de Antonio Escario, sus dibujos y bocetos, que reflejan un modo de hacer casi perdido en una época donde todo se diseña ya por ordenador. Escario fue un arquitecto-artista, «un gran dibujante, de trazo elegante y fina sensibilidad», como muestra la exposición, que no incluye sin embargo, los trabajos de la que fue quizás su época más brillante ( 1970-1989) en la que compartió despacho con Vidal y Vives (EVV).

El «espíritu atrevido y audaz ingenio» de Antonio Escario tuvo gran influencia en los estudiantes de la Escuela de Arquitectura, entre ellos Santiago Calatrava o José María Tomás (sobrino además de José Antonio Vidal) con quien firmó uno de sus últimos proyectos, la reforma de la plaza de la Reina, inaugurada en 2021 y que el arquitecto no vería terminada.

Escario decía que los verdaderos protagonistas de la ciudad debían ser sus habitantes y no los arquitectos estrella. Defensor del espacio público y la infraestructura verde. Autor de la Casa Payá o el Bali de Benidorm, proyectó viviendas de gran calidad por encargo de familias de la alta burguesía valenciana, pero también edificios docentes, religiosos, asistenciales y deportivos. Racionalidad constructiva, compromiso social, economía de medios, priorización de la función sobre la forma e industrialización definen la arquitectura de Escario. Suyos son el edificio de la Tesorería de la Seguridad Social, en la comercial calle Colón; el edificio Rex, en la plaza del Ayuntamiento, las Torres de la Universidad, el Club Náutico; las viviendas de Sorní 9, la sede Mercaflor, los edificios «Abraham» y «Borrull» y el de la plaza Alfons el Magnánim. También la Pirámide Verde de Nuevo Centro y rehabilitaciones como la del Rectorado de la UV, el Palacio de Montortal o el Capitol.