Acaba noviembre y lo hace como el peor mes de esta segunda ola. Más de 450.000 contagios notificados en los últimos 30 días. Hospitales saturados y unas cifras de fallecimientos de vértitgo: 512 muertes por COVID-19 el 9 de noviembre, cifra durísima que se repitió solo dos semanas después. Y que subió el día 24 hasta los 537. En total, Sanidad ha incluido más de 9.000 fallecimientos, aunque 1.300 de ellos corresponden a una actualización del ministerio de meses anteriores. Números similares a los que dejó un terrible mes de marzo al que siguió el aún peor abril. Pero en noviembre los números mejoran. España registra los peores datos a principios de mes con una incidencia acumulada de 529 casos por cada 100.000 habitantes. Solo tres semanas después estamos casi a la mitad, pero no hay que confiarse, hay que seguir trabajando para que en diciembre tengamos una blanca Navidad y no un mes teñido de negro.