Hace unos días escribía un artículo en este periódico el político Toni Infante sobre el cual me gustaría decir algunas cosas. Se extrañaba del escándalo que habían provocado las afirmaciones del conseller catalán Gordo sobre la «nació gran», es decir el Anchluss que querrían hacer los independentistas catalanes sobre los valencianos. Y se preguntaba por qué un madrileño o un segoviano podían opinar sobre Valencia y un catalán no. Pues por la misma razón que usted que es andaluz puede opinar sobre la absorción de la Comunitat Valenciana por parte de una Cataluña independiente.
Cuando esta carte se publique, ya conocemos los resultados de las elecciones autonómicas en Cataluña: 1,6 millones de votos para «Junts pel 3%» y 71 escaños contando con las CUP, es decir, mayoría de escaños y minoría de votos sobre un censo de 5,5 millones de votantes. Las soflamas independentistas son legítimas pero no dejan de ser eso, mensajes simplistas... de ganar elecciones con mensajes simplistas que sabemos por la historia: repetir machaconamente una serie de mentiras que caen en tierra abonada y tienen éxito.
Le deseo éxito con su plataforma, pero pienso que a la Comunitat Valenciana llevamos mucho tiempo decidiendo. José Roselló Hernández. Valencia.
