La mayoría de familias y empresas, sobre todo las pequeñas y medianas, tienen problemas económicos, deudas con los bancos, dificultades para llegar a fin de mes o para cuadrar sus cuentas. Algunos intentar afrontar estos problemas con el ahorro, gastando menos, apretándose el cinturón en lo no necesario. ¡Un grave error! El Consell, con sus presupuestos expansivos para 2018, nos ha dado a todos una buena lección de economía. Los puntos esenciales son: aunque usted deba mucho, no tenga miedo y aumente, ¡dispare el gasto! Al final, alguien lo pagará. No gaste solo en lo esencial, también en lo superfluo como radiotelevisiones o chiringuitos para los amigos. Si el presupuesto no le cuadra no importa, añada ingresos ficticios hasta que lo consiga. No piense en el futuro, en las enormes deudas que dejará como herencia a hijos y nietos.¡Piense solo en el presente! ¡En sonreír, feliz, en las fotos para la prensa! ¡El que venga detrás que arree!