El problema del tratamiento de residuos hasta que se inaugure la planta de Cervera, aunque todavía no se conoce la ubicación exacta del vertedero, va más allá. La conselleria no descarta ampliar el vertedero de Vilafranca para depositar los residuos de los municipios de Els Ports, a pesar de la clara oposición del propio ayuntamiento y la Mancomunidad de Els Ports. Según Lamparero, "el vertedero de Vilafranca no se cierra y se abre por voluntad de alguien". En respuesta a los municipios que se oponen a esta ampliación y reclaman sellarlo este verano, el secretario general de la Conselleria de Medio Ambiente ha afirmado que este vertedero es legal y puede recibir la basura de los pueblos pequeños del interior.
La controversia surge si se tiene en cuenta que el vertedero de Vilafranca sólo dispone de tres o cuatro meses de vida útil. En la última ampliación, hace cinco años, la diputación se comprometió a no continuar construyendo balsas si así lo decidían los municipios afectados. El anuncio realizado por Lamparero desdice el compromiso adoptado por la institución provincial. Según el alcalde de la localidad, Óscar Tena, "aquí no van a venir los residuos porque no vamos a pagar nosotros el retraso de la planta de Cervera".
En este sentido, Tena ha mostrado su malestar y ha reclamado a la conselleria que se les dé a estos 21 municipios la opción de trasladar los residuos a la planta de transferencia provisional de Benicarló. Tena ha reclamado a la conselleria "sentido común" y ha advertido que no van a conceder ninguna licencia de ampliación.
