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La mayoría de municipios de la provincia acogidos al plan estatal de pago a proveedores han superado los requisitos exigidos por el Gobierno, que les obligaba a presentar un plan de ajuste que garantice el equilibrio entre gastos e ingresos. Los más endeudados se han visto abocados a subir impuestos, tasas y precios públicos para conseguir crédito. Ha habido algún caso puntual, como el Ayuntamiento de Altura, que ha quedado excluido, aunque el alcalde asegura que se trata de un problema técnico ya subsanado.
El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas impulsó a principios de año un plan para garantizar a las empresas suministradoras de los ayuntamientos el cobro de las facturas pendientes de pago anteriores al 1 de enero de 2012. La iniciativa consiste en la concesión a las entidades locales españolas de un crédito de 35.000 millones para que salden sus deudas con las empresas. Los ayuntamientos tendrán diez años para devolver el dinero, con dos de cadencia, y un interés cercano al 5%. Para acceder a financiación, el Estado obligaba a los municipios a aprobar antes del 31 de marzo un plan de ajuste que garantice que los gastos no exceden los ingresos, recoja una adecuada financiación de los servicios públicos y describa las medidas de reducción de cargas administrativas.
Los ayuntamientos castellonenses más endeudados han superado el examen y tendrán crédito para pagar a los proveedores. El de Castelló tiene facturas pendientes por valor de 46,7 millones que se financiarán a través del plan estatal. Para ello, el consistorio ha tenido que realizar duros ajustes y apretar a los vecinos de Castelló con un incremento de un 20% del IBI y la subida de una veintena de tasas municipales.
Vila-real tenía una deuda de 2,2 millones, que será financiada a través del plan de pago a proveedores. El ayuntamiento ha tenido que subir algunas tasas de deportes, cultura y cementerio.
Almassora ha conseguido crédito para sufragar el 89,4% de las facturas pendientes de pago a proveedores. De los 2.424.336 euros elevados al Estado, serán 2.222.264 euros los que logren financiación. Los 262.8851 euros de diferencia se corresponden con facturas no aplicadas al presupuesto por incidencias con las empresas suministradoras.
El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó, con una deuda de casi 8 millones, también ha logrado financiación. El alcalde de la ciudad, Óscar Clavell, informó ayer de que el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha dado el visto bueno al plan de ajuste. "Son casi 8 millones de euros que se pondrán en circulación en la Vall d'Uixó para pagar a los proveedores", destacó. Para ello, se han adoptado medidas como el aumento del impuesto de circulación y de varias tasas. En la Plana Baixa también se ha dado luz verde a los planes de ajuste de municipios como Moncofa (6,2 millones de euros), Xilxes (2 millones), Almenara (un millón), Nules (630.000 euros) o la Llosa (150.000).
Burriana, con una deuda de 3,9 millones, ha obtenido el visto bueno ministerial tras realizar los pertinentes ajustes. En la zona norte, Morella (1,5 millones de deuda), Vilafranca (540.000 euros) y Sant Mateu (un millón) también han accedido al plan de pago a proveedores. Al igual que Cervera del Maestre y Santa Magdalena.
El caso de Altura
El municipio de Altura ha quedado excluido del plan de pago a proveedores. El alcalde, Rafael Rubio, lo atribuyó a "un error técnico de falta de documentación" que ha sido subsanado. Rubio se mostró convencido de que Altura se podrá acoger a este plan para financiar los dos millones que adeuda a proveedores. El ayuntamiento conoció la noticia el pasado miércoles y, según el alcalde, se puso en contacto con el ministerio para que le explicara el motivo de la denegación. Tras estudiar la documentación, Rubio aseguró que "se trata de un error puntual de falta de documentos que ya ha sido subsanado".
información elaborada por
S. Fructuoso, A. Monleón, A. Torregrosa, V. Granel, J. Maura y C. Costa
