El Ministerio de Medio Ambiente ratificó el lunes su apoyo al proyecto Indemares que se opone a las prospecciones petrolíferas en Columbretes y que eleva la protección de la reserva marina al incorporar dentro de la Red Natura 2000 de la Unión Europea el espacio marino Delta del Ebre-Illes Columbretes. Este respaldo fue escenificado por el director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del ministerio, Pablo Saavedra, que presentó en Madrid los resultados finales del Proyecto LIFE+Indemares, el cual calificó como «el proyecto más importante desarrollado en España sobre conservación marina».
El proyecto ha incrementado la superficie marina protegida en España desde menos del 1% a más del 8%, contribuyendo al objetivo del Convenio de Diversidad Biológica, que fija en al menos un 10% el porcentaje de protección de las regiones marinas de cara al año 2020. A este respecto, Saavedra aseguró que seguirá trabajando para alcanzar dicho porcentaje.
LIFE+ Indemares ha estudiado casi cinco millones de hectáreas marinas a través de 50 acciones y 150 campañas oceanográficas. Asimismo, a lo largo del transcurso de este proyecto, se han descubierto más de 50 nuevas especies marinas y se han celebrado 33 comités científicos, de gestión y de comunicación. Además, ha gestionado un presupuesto de 15,4 millones de euros cofinanciados al 50% por la Comisión Europea.
Asimismo, 300 colaboradores y 23 organizaciones, entre las que se cuentan universidades, fundaciones, asociaciones y empresas, han trabajado directamente en el proyecto. También se ha impulsado la implicación de la sociedad a través de jornadas de participación pública con el sector pesquero y otros agentes con intereses en cada una de las áreas.
Cetáceos
Saavedra destacó en su intervención los nuevos estudios sobre los cetáceos del mediterráneo y las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), con especial hincapié en la gaviota Audouin, ambos valores que cobran especial relevancia en el caso de la reserva marina de Columbretes. En referencia a la reserva castellonense, uno de los documentos del proyecto Indemares expuestos al público por Medio Ambiente advirtió textualmente que en el entorno protegido (Columbretes-Delta del Ebro) deben prohibirse nuevos proyectos de hidrocarburos, e incluso restringirse el actual operativo en Tarragona (la plataforma Casablanca de Repsol). «La construcción de nuevas infraestructuras debería estar muy restringida, e impedirse todas aquellas que supongan un serio riesgo para las aves y otros organismos (parques eólicos, nuevas plataformas petrolíferas, etc.)». De hecho, el ministerio también exige un mayor control para los proyectos ya existentes. «Merece especial atención la contaminación, en particular por hidrocarburos: es necesario el control estricto de su explotación y transporte, así como el diseño de planes de actuación en caso de vertidos accidentales».
De igual modo, los científicos del ministerio exponen que las diversas actividades industriales a lo largo de la costa (sobre todo las petroquímicas) «son0 una fuente de contaminación importante y a éstas deben sumarse los aportes del río Ebro, afectado por actividades industriales y agrícolas». Los técnicos también reclaman un mayor control de las actividades pesqueras para prevenir daños.
