La Unión de Consumidores de Castelló (UCE) censuró ayer el incremento del Impuesto de Bienes Inmuebles en la ciudad, tal como revelan los primeros recibos remitidos a vecinos de la ciudad, e instó a adecuar la presión fiscal a la actual situación de crisis económica, que ha producido una disminución del poder adquisitivo de las familias, afirmó el secretario general de la UCE, Juan Carlos Insa.
«La presión fiscal crece por mucho juego de palabras que se utilice», sostuvo Insa, que lamentó que el «problema de fondo que subyace es una presunta revalorización de unos usos inmobiliarios cuyos precios han bajado. Es decir, los inmuebles bajan y los impuestos suben, no tiene ninguna lógica».
Insa recordó que este aumento impositivo se ha registrado cuando el nivel salarial de los castellonenses se ha visto mermado por la crisis económica. A su juicio, «no tiene sentido que los ciudadanos hagan frente a las malas decisiones tomadas en los últimos años por algunos gestores». «El coste se tendría que asumir con otros criterios», remarcó.
De esta manera, el representante de la UCE se refirió a la subida del recibo del IBI de este ejercicio. Este alza es consecuencia de la última revisión catastral aprobada en 2012. La contribución se barema con el catastro y su última modificación lleva aparejada un aumento del catastro de cerca de un 10 % al año de 2012 a 2022. El equipo de gobierno acordó bajar del 0,80 al 0,78 % el coeficiente del IBI para compensar los efectos de la variación catastral, pero este cambio es insuficiente y la factura de este impuesto continúa en alza. Ha amortiguado el aumento, ya que el IBI habría subido un 10 % sin esta corrección, pero los contribuyentes pagarán de manera general más IBI este año que en 2014.
Varios vecinos han mostrado recibos que evidencian un incremento de un 5 % respecto al ejercicio anterior. Uno de los mismos ha recibido respuesta del ayuntamiento, en la que reconoce que se es debido a la actualización del catastro de 2012. Por este último motivo, el IBI ha subido cerca de un 25 % en los últimos cuatro años.
El equipo de gobierno subraya que facilita una extensión de hasta un 90 % a las familias numerosas con rentas bajas. La oposición considera que estas bonificaciones se deberían extender a los hogares afectados por la crisis económica.
